Padre Fernando Pascual L.C.
La palabra “discriminación” tiene muchos significados. Uno es claramente negativo: tratar de modo injusto a una persona porque se rechaza alguna de sus características, como el color de la piel, el sexo o la edad. Pero también puede tener otros significados “neutros”, como el de distinguir o tratar a las personas de un modo correcto, justo, respetuoso, pero con matices diferentes y legítimos.
¿Quién controla los filtros?
Sobre cualquier hecho se pueden dar cientos de interpretaciones.
Lo vemos en todos los ámbitos de la vida humana: respecto del pasado o del presente, del fútbol o de la vida laboral, de la política o de la religión.
Cientos de científicos e intelectuales se habían reunido para preparar el manifiesto por un mundo perfecto.
Allí estaban médicos y biólogos, geólogos y astrónomos, meteorólogos y ambientalistas, economistas y químicos, sociólogos y psicólogos, ingenieros y matemáticos, arquitectos y agrónomos, filósofos y periodistas.
La primera sesión tenía un título atrevido y difícil: “Por la construcción de una mentalidad científica”.
La cultura de Occidente y de otros muchos pueblos ha creído siempre que el hombre era superior a los animales. Esta convicción, sin embargo, es discutida en la actualidad por algunos autores del movimiento animalista, y nos exige una reflexión atenta sobre el tema.
Podemos iniciar con un párrafo del preámbulo preparado para la Constitución europea, dado a la luz primeramente en mayo de 2003, retocado en el mes de junio, y presentado en la reciente reunión de Salónica (20 de junio de 2003):
Entre las muchas palabras que aparecen de vez en cuando en la vida pública hay una que reúne significados no siempre bien comprendidos: “indígenas”.
El año de la Eucaristía
No se cansa este Papa enfermo. No le ha detenido ni el peligro de la muerte. No le asustan las amenazas de algunos poderosos, ni las críticas de los críticos endémicos, ni la crisis de vocaciones, ni la falta de fe en tantas familias. No le paraliza esa enfermedad que no oculta en público, mientras suspira, gime, llena de dolor y de lucha cada palabra, cada gesto. No deja de proponer nuevos retos a un mundo, a una Iglesia, que camina fresca, entusiasta, en un milenio entre pañales.
La ONU dedica el 1 de diciembre a recordar una de las enfermedades que más estragos ocasiona en el mundo, especialmente en África: el SIDA.
España celebra 25 años de una Constitución aprobada por referendum el 6 de diciembre de 1978. Una Constitución que, según muchos, ha permitido la paz y la concordia en un pueblo que sabe lo mucho que se puede sufrir por culpa de la violencia y de la guerra.
La Iglesia católica, el preservativo y el SIDA
Desde hace años algunos grupos critican a la Iglesia por su actitud ante el preservativo (el condón). Estos grupos dicen que el preservativo reduce enormemente el número de contagios de SIDA y de otras enfermedades de transmisión sexual, por lo que la Iglesia debería recomendar el uso de este instrumento para evitar contagios en millones de personas. Ya que la Iglesia no sigue este consejo, algunos la critican con dureza como irresponsable y como culpable de la difusión del SIDA.
Diálogo interreligioso, verdades y errores
¿Se puede hablar de verdadero o falso, de correcto o incorrecto, de acertado o equivocado, a la hora de iniciar un diálogo entre religiones?
Según una opinión más o menos difundida, la pretensión de poseer la verdad, de tener razón, de estar en lo cierto, podría llevar a actitudes de desprecio, de intolerancia. Es decir, llevaría a impedir el diálogo, a poner serias trabas en las relaciones humanas. Si uno piensa que tiene razón y que los demás están equivocados, ¿cómo puede ser posible el diálogo?