El primer paso en la vida espiritual
Un
primer y gran paso en la vida espiritual es el de la humanidad radical:
el aceptar a Dios, a Cristo, como aquello que son: "mi Dios", "mi
Creador", "mi Redentor"; y también el aceptarnos a nosotros mismos como
aquello que somos: una creatura, una persona pecadora, débil y
limitada, una persona a quien han redimido gratuitamente. Cristo renovó
nuestra naturaleza caída por el pecado original, pero quiso que
lucháramos hasta la muerte por conquistar nuestro ideal. Lo que a Él le