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Padre Mariano de Blas L.C.

Estrena la vida.

Estrena la vida

Cada día es irrepetible.

Cada día estreno sorpresas y aventuras,

Estreno la alegría de vivir.

Entonces, disfruta de la vida,

como quien comienza y estrena la vida,

la fabulosa vida de los hijos de Dios.

¡Vive hoy solamente!

Disfruta los momentos que tienes en las manos,

utilízalos lo mejor que puedas,

ama cuanto dé tu corazón,

y se más bueno que ayer,

y prepárate para ser mejor mañana.

Cursillos.

Cursillos

Las horas se van cargadas de charlas, confesionarios,

eucaristías y orientaciones morales.

Pero cuanto más trabajo se me pide,

más llenas se van mis arcas con las gracias de Dios.

Estos cursillos tienen un algo

que los hace felices, fructuosos, deseables,

para el sembrador de ideales.

No se pueden marchar del recuerdo

los días aquéllos,

los maravillosos encuentros

Rosario al atardecer.

Rosario al atardecer

El paseo por aquella terraza

me introducía en la tarde bondadosa.

Mis ojos se marchaban a las pacíficas nubes

de la tarde gloriosa:

volaban hacia losárboles con temblores de vientos,

y el alma se iba más lejos,

queriendo coger, en sus manos invisibles, la paz,

la sublime paz de Dios.

Soñaba y soñaba, creyendo que los sueños son reales,

Otra vez, Cuernavaca.

Otra vez, Cuernavaca

Cuernavaca es una ciudad encantada.

Su clima me envuelve en una atmósfera

de paz y ternura y auténtica felicidad.

Sus jardines exuberantes deárboles y flores:

sus aguas cristalinas, su cielo y sus estrellas,

los llevo en el corazón.

Recuerdos vibrantes de calor y nostalgia

duermen en mi alma,

y despiertan alegremente cuando vuelvo a ella.

¡Qué felices los días en Cuernavaca!

Son medicina que me cura de malestares

enojos y cansancios.

Navidad.

Navidad

La fiesta del nacimiento de Cristo

llenó el alma de villancicos, de paz,

de salvación recién estrenada.

Todos los esfuerzos humanos

para realzar la venida de Cristo

a nuestro desierto,

para convertirlo en tierra habitable, son muy pobres.

Creo que, sólo en el cielo, daré las gracias,

como merece, a mi Redentor.

Para mí ha venido, para mí ha nacido.

Reflexión Viernes Santo

Viernes Santo

Todo el día dedicado al dolor de Cristo,

al amor eterno.

Amor se escribe con sangre:

sangre, amor y dolor de mi Redentor.

Les digo que sus ojos que si quieren llorar,

lloren a mares, que buena falta les hace,

y subidos efectos producen en el alma agradecida.

Cristo besó el suelo podrido de mi alma,

y no sintió náusea.

Yo tengo que besar

Sus llagas benditas

Para curar la lepra de mi alma.

Paz de Tepeji.

Paz de Tepeji

Se ha puesto el sol en Tepeji

y el fresco vespertino

ha invadido el pequeño valle

donde se encuentra nuestra casa de vacaciones.

A unos metros se desliza

el río manso y silencioso.

Añososárboles sombrean sus orillas

y dan grandiosidad a la escena.

Suenan campanas del atardecer.

Aún es azul el cielo,

con escasos jirones de nubes blanquecinas.

Se filtra el ronroneo de los motores de los autobuses

Todos los santos

Todos los Santos

Fiesta de todos los adalides del cristianismo:

los que lograron lo único necesario,

los que dejaron pasar lo pasajero

y se quedaron con lo eterno.

Los felices, los eternamente felices,

¡Qué envidia!

Señor, haz que les imite,

que yo también me arranque de lo vano y falaz,

y que me aferre a los valores eternos.

Ser santo es posible para mí,

como lo fue para ellos.

En este mismo instante hay hombres y mujeres

que se están haciendo santos.

¿Qué harás Tú?

"

 

Teresa de Avila.

Teresa de Ávila

Fiesta de una santa grande, salerosa, de mi tierra.

Teresa de Ávila, que supiste juntar

la santidad más sublime

con la gracia y donosura de tu tierra castellana,

¿tendrás para mí algún rescoldo de tu ingente hoguera

para incendiar de amor y de pasión mi alma fría?

Teresa del Carmelo y del castillo interior,

monjita andariega de los caminos de España,

fundadora de conventos de reforma y penitencia,

Rompecabezas.

Rompecabezas

Fue una ilusión y una furia

acabar el rompecabezas.

Y lo acabamos.

Me tocó en suerte incrustar la última ficha

que ajustó perfectamente en el tablero.

El castillo, con sus montes cubiertos de pinos,

su lago de cristal y su cielo azul,

aparecieron ante los ojos triunfadores.

Y pensé:

-“Es hermoso acabar las tareas”.