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El artífice de la Santidad

Al terminar su vida terrena, Jesucristo prometió enviarnos al Espíritu consolador, que es quien ha de llevarnos a la verdad completa. El conocimiento y, en general, el conjunto de las relaciones con Cristo, es obra del Espíritu Santo, pues Él es el guía y el artífice de la santidad, el que ilumina el corazón del hombre, el que le fortalece en su debilidad, el que hace que su apostolado sea fecundo y sus frutos permanezcan. La Iglesia resalta la acción del Espíritu Santo invocándolo como padre de los pobres, dador de dones, luz de los corazones.

El amor al Espiritu Santo

El Movimiento presenta a sus miembros una espiritualidad alentada por el Espíritu Santo y abierta a su acción poderosa, y les invita a incrementar en sus vidas la fe y el amor a la Tercera Persona de la Santísima Trinidad, a ser dóciles y fieles a sus inspiraciones para que, iluminados y fortalecidos con su gracia, caminen fielmente por el sendero de la voluntad de Dios, a ejemplo de Jesucristo, y realicen con plenitud su vocación cristiana.

Qué es amar a Cristo

Sólo cuando se ama a Cristo, se puede ir adelante arrolladoramente. Y se ama a Cristo cuando se piensa como Él, cuando se siente como Él, cuando se quiere como Él, cuando se busca lo que Él busca, cuando se ama lo que Él ama, cuando se vive obsesionado por los intereses que Él tiene y no por los propios intereses, por los mezquinos intereses personales; entonces se ama a Cristo. Y se ora, fíjense ustedes bien, se hace oración, y se reza cuando se ama a Cristo. Cuando no, analicen ustedes a ver si oran y a ver si rezan.

Èl es el amigo que buscan los hombres

¿Ha visto los enormes conflictos en que se debaten tantos hombres que no conocen a Cristo? Tantos jóvenes envejecidos prematuramente por el vicio, con el alma lacerada por el hastío, por el desengaño, por la frustración o el aburrimiento; su vida ha perdido la brújula, ¿para qué y por qué vivir? No tiene respuesta. De aquí al suicidio no hay sino un paso lógico que muchos por desgracia, dan. ¡Y sin embargo, Cristo es el camino, la verdad y la vida!

Asistencia a la misa

Asistencia a la misa

No es difícil encontrarnos con hermanos cristianos que dicen: "Yo si creo en Dios, pero no voy a misa". Desafortunadamente esto ha ido cundiendo en nuestras comunidades, haciendo que se desvalore la celebración comunitaria en la Eucaristía dominical.

Autocomunicación de Dios al hombre

Autocomunicación de Dios al hombre

Quizás una de las experiencias más fuertes que el hombre puede llegar a tener en su vida es el descubrirse habitado por Dios, el darse cuenta de que Dios vive dentro de él como en un templo. Cuando el hombre se da cuenta de esto interiormente, es decir por lo que Karl Rahner llama: la "auto comunicación de Dios al hombre", su vida se transforma ESENCIALMENTE. Por un lado nuestro cuerpo adquiere el valor que Dios le ha dado, por ello la embriaguez, el tabaquismo, las trasnochadas frecuentes no tienen cabida.

Actitudes ante la oración

Actitudes ante la oración  

Para poder, verdaderamente crecer en la vida cristiana son necesarios tres elementos, los cuales pueden ser considerados como los pilares de la construcción: Los Sacramentos, la Oración, la Lectura y Meditación de la Palabra de Dios. Cada uno contribuye a su modo, a formar interiormente a Cristo y a permitir que éste se transparente en nuestra vida. De entre estos, uno de los más importantes es la oración (sin que esto quite nada a la importancia y fundamentalidad de los otros).

El Amor, como valor en la familia

Creo que para todos es claro, o debería serlo, que el amor es un valor fundamental para la familia. La familia es la escuela del amor, donde primero aprendemos a amar de pequeños; y de este aprendizaje primario del amor muchas veces depende si, más adelante en nuestra vida, nuestro amor es completo, íntegro, y enriquecedor. Si no hay amor en la familia, ¿en donde lo habrá?