Pasar al contenido principal

Educar con el ejemplo

Actualidad del Mensaje de Fátima

En Portugal, la Virgen María se les apareció a tres pastorcitos en una cueva. Lucía, Francisco y Jacinta tenían respectivamente 10, 9 y 7 años de edad. Jugaban los tres niños en una propiedad de los padres de Lucía llamada Cova de Iría, a dos kilómetros y medio de Fátima. Vieron a la Madre de Dios sobre una encina. Era “una Señora toda vestida de blanco, más brillante que el sol, que difundía una luz más clara e intensa que un vaso de cristal lleno de agua cristalina atravesada por los rayos del sol”. Su rostro no era “ni triste, ni alegre, sino serio”.

¿Hay esperanza frente al alcoholismo?

Al escritor Jorge Luis Borges, anciano y ciego, le preguntaba un joven:

“¿Cómo es posible que un hombre tan culto e inteligente como usted, se empeñe en oponerse al curso de la historia?”. La respuesta fue la siguiente:
“Oiga, joven ¿no sabe usted que los caballeros sólo defendemos causas perdidas?”. Las causas perdidas son las únicas que vale la pena defender. No
sólo porque las otras se defienden solas, sino porque la verdad siempre aparece como desvalida.

¿Cómo dar clases de catecismo?

El personaje central de todo catecismo ha de ser Nuestro Señor Jesucristo, su vida, sus enseñanzas, su amor al Padre, el envío del Espíritu Santo y el don de dejarnos por madre a su Madre. Hay que mantener la memoria activa para que esté en buen estado. Para tener mayor capacidad de memoria hay que sacar a nuestro sistema nervioso de la rutina a través de su ejercitación.

¡Quédate con nosotros!

San Lucas cuenta el episodio de los discípulos de Emaús: El mismo día que la Magdalena vio a Cristo resucitado, dos de los discípulos iban a Emaús. La beata Ana Catalina Emmerick dice que eran Cleofás y el mismo Lucas. Los dos discípulos conversaban entre sí, cuando  de pronto un desconocido se les unió: 

Nazaret, tarea educativa de María

(Lc 2, 51-52) 

María, con la espada bien clavada en el corazón, sale del templo, adolorida. Jamás hubiera pensado que fuera tan duro ser la madre de Dios. Tuvo que redimensionar mucho sus pensamientos. Ese santo orgullo que sintió en Belén por ser la madre de Dios, por tener entre sus manos al mismo Hijo de Dios, ahora ese mismo orgullo viene purificado por la espada de dolor. 

María

María es un monumento de caridad,

maestra de todas las virtudes.

Es nuestro modelo.

¡Nunca podremos imaginar

lo grande que es María!

Está toda revestida

de la Palabra de Dios.

Aquél "conservaba todas las Palabras

en su corazón " (cf. Sal. 119,11)

significa que las vivía.

María era totalmente la Palabra,

sólo la Palabra.

Ser la Palabra viva

significa revivir en la tierra a María.

Si, al tratar de amar,

el amor se hace recíproco,

Cristo reina entre dos o más.

La escuela de la fortaleza

Un estudiante decía a su maestro:
—¿Por qué seré tan tímido? ¿Por qué me siento inferior por mi poca estatura y porque tengo poco dinero?
Su maestro respondió:
—Porque tienes una falsa escala de valores: ¿piensas que la Madre de Jesús o San José se sentían poca cosa porque eran pobres? Te falta la verdadera estatura de un hijo de Dios. Eres grande y no lo sabes.

La eficacia del ejemplo

El Papa Juan Pablo II habla de la necesidad de que haya santos para renovar el mundo; y santos con buen humor.
Hemos de centrar toda nuestra jornada en la Cruz, que es lo mismo que centrarla en la Santa Misa. Hemos de dar sentido a todos los segundos de nuestra vida amando la Cruz, esto es, las dificultades de la vida ordinaria y los sufrimientos que nos manda Dios, para purificarnos y para ayudarle a salvar almas.

La curiosidad del niño de 3 a 5 años

Cuando un niño hace una pregunta de cómo nacen los bebés, conviene no salir de su contexto. ¿Cuál es el contexto de sus preguntas? El de su experiencia.
Una niña de 3 años le preguntó a su mamá:
—¿Cómo nacen los gatitos?
Su mamá le preguntó a su vez:
—¿Cómo crees tú que nacen?
A lo que la niña contestó
—¿Yo?...Chiquitos y bonitos.
—Pues sí, así nacen: chiquitos y bonitos.

Bendecir la mesa, una costumbre que ayuda a que vuestros hijos vivan en un ambiente cristiano

La Bendición de la mesa es una costumbre antiquísima entre los cristianos; y, antes, entre nuestros hermanos mayores, los judíos. En los relatos evangélicos se puede observar como el propio Jesús, nuestro Señor, lo hacía. No sólo en la última cena, sino que, por ejemplo, antes de multiplicar los panes, bendice al Padre, pronuncia la bendición de agradecimiento… Lo mismo hacen los discípulos, como se puede apreciar en el libro de Los Hechos de los Apóstoles y otros del Nuevo Testamento.

¿Qué significa bendecir algo o a alguien?