Pasar al contenido principal

Aborto

Un no para un sí

El no al aborto es un sí a la vida, al amor, a la alegría, a la paz, a la justicia.

No nos dejemos engañar: decir que existe un derecho al aborto, insistir en que se trata de un problema de “salud pública”, defender que las mujeres pueden decidir con total libertad qué hacer con el hijo que ya existe, es lo mismo que promover una gran mentira, defender un atentado sumamente grave al derecho, atacar lo más bello que hay en el corazón humano: la capacidad de amar sin límites.

Una hecatombe silenciosa: los embriones que mueren en la fecundación artificial

Se ha publicado recientemente un amplio estudio sobre las técnicas de

reproducción artificial en Europa, referidas al año 2000[1]. En el mismo se presta especial atención a los datos relativos a dos técnicas: la fecundación in vitro (FIV ó IVF), y la inyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI), aunque también se habla de la transferencia de embriones descongelados.  

Superar la ideología pro aborto

 

En las discusiones sobre el aborto hay pasión y hay argumentos. A veces más lo primero que lo segundo. No nos puede dejar indiferente el que una mujer, una madre, sufra tanto ante un embarazo, se encuentre sola, tal vez presionada, y decida, por sí misma o por miedos, terminar con todo, acceder a un aborto.

En estas discusiones no falta quien acuse a los enemigos del aborto de usar su “ideología” para imponer su punto de vista a toda la sociedad. En esta acusación hay dos aspectos importantes.

Terapias verdaderas

No es terapia eliminar a enfermos para que sólo nazcan y vivan los sanos. No es terapia buscar caminos para que el hijo “perfecto” siga adelante y el hijo “dañado” sea eliminado. No es terapia invertir dinero para diagnósticos que llevan a suprimir a miles de embriones no queridos.

¿Sobran embriones?

Sobra basura, sobran plátanos, sobran hormigas, y, según algunos "sobran embriones".

Decir que "sobran" plátanos significa que podemos tirar o regalar esos plátanos que están "de más". Decir que sobran hormigas significa que, según nosotros, son demasiadas las hormigas que corren por nuestros campos y ciudades, y podemos no tener remordimientos de conciencia si cada día matamos cientos de ellas mientras paseamos por la calle.

¿Sirve una ley contra el aborto?

 Que ha habido siempre robos y crímenes no es noticia. Que se han sucedido numerosas leyes y normativas para evitarlos tampoco lo es. Y es menos noticia el que, a pesar de todo el aparato legal elaborado durante siglos de historia de muchos pueblos y culturas, siguen habiendo robos, crímenes, violaciones, trampas y otras muchas formas de abuso y de injusticia.

Ser o no ser viable: ¿es esa la cuestión?

Poner fronteras puede llevar a pensar que lo que se encuentra a un lado de la frontera es distinto de lo que se encuentra al otro lado.

En el mundo moderno hay personas interesadas en establecer fronteras para indicar que existen distintos tipos de embriones y fetos. Unos serían “viables” al estar bien desarrollados, al ser sanos. Otros serían “no viables”, porque todavía son muy pequeños o porque tienen defectos o enfermedades más o menos graves.