Padre Miguel Rivilla San Martín
Hasta ayer mismo que leí una entrevista en la que el periodista Miguel Pato le hizo al conocido artista Pedro Ruiz , para Periodista digital, con ocasión del espectáculo que iba a estrenar en el teatro Coliseo de Madrid, tenía en buena consideración al polifacético showman, como inteligente, ingenioso y original. Pues bien, se me han caído los palos del sombrajo al leer lo que tal señor dice sobre el tema de Dios.
Lo poco que los humanos sabemos del Ser Supremo, del Infinito, del Absoluto, del Incomprensible e Inabarcable, no es por razonamientos o silogismos mentales, al tratar de exprimir nuestra inteligencia limitada y finita, sino por revelación del mismo Dios.
Gracias a la Palabra de Dios encarnada, Jesucristo, el hombre puede atisbar-nunca comprender- el misterio insondable y el océano infinito de la Divinidad.
Un pensador actual ha escrito: ”La vida es como un paréntesis en el tiempo. Se abre con el nacimiento y se cierra con la muerte. Poco importa que ese paréntesis sea largo o corto. Lo que importa es lo que se ponga dentro de él.. A muchos la propia vida les produce vértigo”.
Por legal votación democrática del Consejo Europeo, una vez más, Dios ha sido arrinconado y puesto entre paréntesis, en el Tratado que sustituirá a la Constitución Europea.
Una nueva oportunidad perdida para reafirmar y reactivar las raíces cristianas del viejo continente de los diversos países que forman y conforman la UE. Pronto se han olvidado y echado en saco roto, las palabras-consigna- del gran Papa Juan Pablo II:”Europa sé tú misma”.
Me limito a constatar un hecho: La mayoría de los bautizados españoles no han asumido, a juzgar por lo que se ve, uno de los principales deberes de su religión cristiana: "Santificarás las fiestas". EL Dios de Jesucristo, "Padre nuestro", ha perdido la batalla en el corazón y en la vida de sus hijos, frente al dios pagano del consumismo. Son los nuevos templos de la modernidad, Grandes Superficies, Corte Inglés, Hiper, Makros, Supermercados, Prycas, Continentes etc, los que atraen masivamente e interesan a la hodierna feligresía, que aún siguen considerándose "cristianos".
Se ha dicho y es verdad, que cuando se desplaza al único y verdadero Dios de la vida de los hombres, su lugar lo viene a ocupar el demonio u otros falsos dioses. Tal parece el caso que se da con la cinta “La profecía”, que a bombo y platillo propagandístico, tras el “Código da Vinci,” se estrenará mundialmente este martes. Los avispados productores de Hollywood han aguardado la coincidencia de la fecha 6 del 6 de 2006 para el lanzamiento de la cinta , alusiva al último libro de la Biblia o Apocalipsis.
Lo esencial del misterio cristiano de la Navidad lo expresa sucintamente la Iglesia en su profesión de fe, el Credo, cuando proclama: “Creo en Jesucristo.., que por nosotros los hombres y por nuestra salvación bajó del cielo , y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María la Virgen, y se hizo hombre” y también el pueblo cristiano cuando reza: “La Palabra de Dios se hizo hombre y habitó entre nosotros”.
Hay noticias que le dejan a uno desconcertado y perplejo como la de que “30 modelos argentinas se exhiben desnudas para revindicar la paz y los derechos humanos de la mujer”(Agencias 18/6/04).
No alcanzo a comprender la relación que pueda haber entre una cosa y otra.
Si lo que se pretende es lograr la paz, no entiendo cómo se la busca de una manera tan frívola. Si lo que se pretende es que se respeten los derechos de la mujer, mal medio es comenzar no respetándose a sí mismas.
Sin alarmismos innecesarios y sólo desde mi condición de cristiano y español de a pié, quiero lanzar un grito de alerta, por lo que, de no poner pronto y eficaz remedio, se nos viene encima al catolicismo español.
Los sociólogos, los pastores de la Iglesia y algunos políticos y profesionales de la información, vienen detectando, desde hace algún tiempo, signos preocupantes de la imparable y progresiva descristianización de la sociedad española.
Para los que creemos en Dios, está fuera de toda discusión, que Dios -además de ser nuestro Padre, es también nuestro Señor y Creador. Sólo El nos ha creado, salvado y redimido .Por El vivimos, somos y existimos . Aunque EL no apelase a sus derechos de creación y redención, los hombres, sus criaturas -“obra de sus manos “e” hijos por adopción gratuita” ,debemos de “reconocerlos “. Es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darle gracias, siempre y en todo lugar.