Poner el Espíritu frente a la violencia en México
Dijeron que no es mediático; qué tenía ante él una figura que le hacía sombra; que no tiene el gesto amable y la suavidad de su antecesor. En fin, lo tacharon de duro, radical y poco popular. Pero todas las descripciones y predicciones han fallado. Una y otra vez ha convocado a la juventud y ella, jubilosa y entusiasta, se ha reunido con él durante la Jornada Mundial de la Juventud. El Papa Benedicto XVI congregó en Cuatro Vientos, cerca de Madrid, a casi dos millones de jóvenes. ¿Algún líder puede presumir algo igual?