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Navidad

Desvíos de la Navidad

Lo esencial del misterio cristiano de la Navidad lo expresa sucintamente la Iglesia en su profesión de fe, el Credo, cuando proclama: “Creo en Jesucristo.., que por nosotros los hombres y por nuestra salvación bajó del cielo , y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María la Virgen, y se hizo hombre” y también el pueblo cristiano cuando reza: “La Palabra de Dios se hizo hombre y habitó entre nosotros”.

El árbol de Navidad

El bueno de San Francisco de Asís vivía la Navidad maravillosamente. Cantaba, danzaba, contagiando su felicidad. Si el día 25 caía en viernes, lo celebraba en grande. En fecha tan entrañable no se podía ayunar. -Si las paredes pudieran comer carne, hermano León, se la ofrecería para que también ellas pudieran celebrar el nacimiento del Niño Dios– les decía con ternura.

La alegría de la Navidad

Navidad es “Emmanuel”, Dios con nosotros, se hace tan próximo que ya es uno de los nuestros, Dios nos ama: por eso brilla en todo el mundo esta noche que habla de que el éxito a la vida no es triunfar sobre los demás, sino amar, sentirse queridos. Vino a la tierra para decírnoslo. Y nos trae la alegría, fruto de su proximidad (“Alégrate, llena de gracia, el Señor es contigo”, dice el Ángel a Maria; y san Pablo: “alegraos... el Señor es cerca”).

El nacimiento de Cristo

El nacimiento de Cristo

Tema principal

Las “preferencias” de Cristo: humildad, pobreza, pureza, obediencia...

Fruto

Dios se hizo hombre para salvarnos de nuestros pecados y abrirnos el camino al Cielo.

Debemos maravillarnos con el hecho de la encarnación e imitar a Cristo en su pobreza, humildad y pureza.

 

1. Dios se hizo hombre para salvar a los hombres.

Por primera vez Dios entra a formar parte de la historia humana. Desde ese año en adelante, la historia se dividió en dos: antes y después de Cristo.

El mejor regalo navideño. El Papa se interesa por los niños

El mejor regalo navideño

El Papa se interesa por los niños

1) Para saber

En estos días navideños, el Papa Benedicto XVI nos invita a mirar a Dios hecho niño: «El niño de Belén nos hace poner los ojos en todos los niños que sufren y son explotados en el mundo, tanto los nacidos como los no nacidos… Al hacerse niño, Dios nos enseñó a amar a los pequeños y a los débiles».