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Padre Fernando Pascual L.C.

Hechos e Interpretaciones

Hechos e interpretaciones

Cada persona, y especialmente cada periodista, ven hechos, observan datos. Luego, sobre lo que observan, interpretan.

Lo que leemos en el periódico, lo que escuchamos en la radio, lo que nos ofrecen en la televisión, lo que aparece en el mundo de internet, no son simples hechos: la mayoría de las veces son, sobre todo, interpretaciones.

Honrados y Felices

Honrados y Felices

La vida nos da muchos golpes. Quizá lo que más nos duele es ver que, por querer ser buenos, por cumplir con nuestro deber, las cosas nos salgan mal. Si me paro ante el semáforo en rojo, el coche de atrás choca contra mí, y, encima, se pone a insultarme. Si pago los impuestos, mis compañeros se ríen de mí, porque dicen que ya nadie tiene esos "escrúpulos". Si el esposo no engaña a la esposa lo toman por tonto, porque hoy muchos buscan disfrutar al máximo de la primera aventura amorosa que se asome por el camino...

¿Hacer “Menos Malo” lo Malo?

¿Hacer "Menos Malo" lo Malo?

Un terrorista decide asesinar a un presidente. Lleva una granada en la mano. Se acerca a la víctima mientras saluda a la gente en la calle. Va a arrojar su bomba de mano, pero se detiene: el presidente está acariciando a una niñita. Es demasiado matar al presidente y a una niña al mismo tiempo... Espera unos segundos. Cuando la niña se aleja, arroja la granada: acaba de matar al presidente y a otras tres personas adultas.

¿Hacer “Menos Bueno” lo Bueno?

¿Hacer “Menos Bueno” lo Bueno?

El esposo decidió quedarse en casa (¡ya era hora!) para ayudar a la esposa. Limpió la cocina, arregló la zona del desván, ajustó la máquina para lavar ropa... Pero cada vez estaba más irritado, se sentía como león enjaulado, y a cualquier palabra respondía con un improperio. Al final del día a la esposa se le escapó una queja suave (sin dejar de agradecer toda la ayuda recibida): “Pero, mi amor, si te pones así es mejor que no te quedes...”

Felicidad y ética

Felicidad y Etica

“¿Y qué gano si me porto bien?” Cuando un adolescente o un joven pregunta esto, quiere que le demos un motivo para portarse bien, para vivir éticamente, para ver si realmente vale la pena no seguir sus gustos sino lo que le dicen (o ya sabe) que es correcto.

Felicidad y Caprichos

Felicidad y Caprichos

El sacerdote preguntó: "¿De veras quieres ser feliz?" El muchacho no tuvo la menor duda para responder: "¡Claro que quiero ser feliz!" Entonces el sacerdote lanzó un torpedo inesperado: "Entonces, ¿por qué andas detrás de cualquier capricho que pasa por tu cabeza?"

¿Felicidad o amor?

Para muchos, el objetivo principal de la vida humana sería conquistar la propia felicidad. Para llegar a esa meta, uno trabajo o descansa, estudia o juega, se casa o vive soltero, viaja o se queda en casa.

Pero algo nos dice que nuestro corazón no late sólo para alcanzar un objetivo tan hermoso y tan difícil. Porque, en el fondo, el deseo más profundo, el más intenso, el más rico y el más grande que existe en cada ser humano consiste no en buscar la felicidad, sino en amar y ser amados.

¿A quiénes mata el aborto?

¿A quiénes mata el aborto?

El aborto mata a miles, millones de embriones y fetos. Los mata precisamente
en el seno materno, en un rincón maravilloso en el que todos los adultos hemos
transcurrido los primeros meses de nuestra vida humana. Los mata muy cerca del
corazón de sus madres: madres que deciden libremente o que son obligadas a
acabar con la vida de sus hijos.