Oscar Wilde
Joseph Pearce, cuenta:
Oscar Wilde: Falleció en 1900 a causa de la sífilis. Contra todo pronóstico, en su lecho de muerte, fue recibido en la Iglesia católica. Es difícil imaginar un converso menos “previsible” que él.
Joseph Pearce, cuenta:
Oscar Wilde: Falleció en 1900 a causa de la sífilis. Contra todo pronóstico, en su lecho de muerte, fue recibido en la Iglesia católica. Es difícil imaginar un converso menos “previsible” que él.
La educación familiar es un binomio: “cariño y sistema”
Toda la educación se puede resumir en dos palabras: “cariño y sistema”, o bien “amor y autoridad”. Es un binomio inseparable y, si falta uno de los dos, la educación se desequilibra.
El silencio de los padres de familia
Octavio Paz dice que “la castidad cumple la misma función en Oriente que en Occidente: es una prueba, un ejercicio que nos fortifica espiritualmente y nos permite dar el gran salto de la naturaleza humana a la sobrenatural”[1][1].
Con el alma clara, limpia, se entiende más la grandeza del amor. A veces los jóvenes dicen que no se pueden controlar. Hay que decirles: “Si lo (la) quieres, no se hagan daño mutuamente”.
—Fulanita, dame una prueba de amor-, dijo un joven.
Hasta luego, Señor, excúsame,
no tengo tiempo.
Volveré a pasar, no puedo esperar,
no tengo tiempo.
Termino esta carta porque
no tengo tiempo...
Me hubiera gustado ayudarlos pero
no tengo tiempo.
Imposible aceptar,
me falta tiempo.
No puedo reflexionar, no puedo leer,
me veo desbordado,
no tengo tiempo.
Me gustaría rezar,
pero no tengo tiempo.
(...)
Esta noche, Señor,
no te pido el tiempo de hacer esto,
y aquello y lo de más allá,
Yo creo que la vida es maravillosa, fascinante. Se trata de disfrutarlas las cosas según vienen. A veces uno se pregunta: ¿Qué misterio encierra el amor, que puede hacer feliz o desgraciada a una persona?
Siempre tenemos una inquietud, que es ¿cómo ser felices? Hay grandes pensadores y personajes que nos dicen qué piensan de la felicidad. León Tolstoi escribió sabiamente: "El secreto de la felicidad no está en hacer lo que se quiere sino en querer lo que se hace".
El hombre es desdichado porque no sabe que es feliz. San Agustín escribió: Dios lo que más odia después del pecado es la tristeza, porque nos predispone al pecado".
Muy buenas tardes Rebeca, le escribo ya que llevo horas buscando información sobre los celos en internet y este artículo suyo: "Los celos revelan una inseguridad interior", me ha logrado llegar y explica muy bien lo que siento, pues creo que estoy muy consciente de mi problema, que soy muy celosa y que desearía no serlo o al menos mejorarlo, por favor recomiéndeme un libro o déme un consejo, me siento muy mal y no quiero sentirme mas así. Gracias. Amparo a
La delicadeza en el trato es una de las cosas más agradables de la convivencia en una familia o en un grupo de amigos. Se trata de apreciar a los demás, sin miedo a querer, pero sin familiaridades.
Se trata de un “esfuerzo”, porque de modo espontáneo no suele brotar ese trato delicado, que es fruto de la propia exigencia. Contra el trato fino va la brusquedad, ese modo áspero y desapacible de comportarse que nada tiene que ver con la fortaleza en el trato.
Miguel de Cervantes decía:
“es de vidrio la mujer,
pero no se ha de probar
si se puede o no quebrar,
porque todo podría ser”
—Fulanita, dame una prueba de amor-, dijo un joven.
— Si te casas conmigo no te doy una prueba, sino muchas. Si me amas, sabrás esperar a que estemos preparados para casarnos.
— Es que quiero saber si nos acoplamos, responde el joven.