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La unidad de las familias

Año de la Eucaristía

La unidad de las familias

“La Familia, Camino de la Iglesia”

1) Para saber

La Iglesia es consciente del gran valor que tiene la familia y cómo ahí la Iglesia vive, pues cada bautizado es Iglesia. Por ello es necesario cuidarla y mantenerla.

Un relato de un escritor llamado Antonio Trueba, de principios del siglo XX, nos muestra de modo cómico una de las características esenciales del matrimonio: su indisolubilidad. A ese relato se hace referencia con la siguiente narración:

Un millón de amigos

Yo sólo quiero mirar los campos,
yo sólo quiero cantar mi canto
pero no quiero cantar solito
yo quiero un coro de pajaritos
quiero llevar este canto amigo
a quien lo pueda necesitar.

Quiero tener un millón de amigos
y así más fuerte poder cantar. (bis)

Un recado de Dios

No temas, te he llamado por tu nombre.
No temas porque Yo te he redimido.
Tú me perteneces,
tú eres mi elegido.
Si cruzas por las aguas voy contigo.
Los ríos no te anegan,
las llamas no te abrazan,
los fuegos no te queman: dice Dios.

Por eso te alabo Señor.
Mi alma se eleva hacia Ti.
¡Escucha Señor mi oración!

Un amor incondicional

Al terminar la Cuaresma

Un amor incondicional

Pbro. José Martínez Colín
Terminada la Cuaresma, volvimos a tener más presente los acontecimientos que nos trajeron el perdón de nuestros pecados y, con ello, la oportunidad de alcanzar nuestro destino último: la gloria del Cielo. Recibí un relato que nos puede ayudar a reflexionar al respecto.

Un Nuevo Sacerdote, Un Nuevo Susurro de Dios

Un Nuevo Sacerdote, Un Nuevo Susurro de Dios

Dios sigue entre nosotros. Sigue en cada obispo, en cada sacerdote, en cada cristiano que vive a fondo el Evangelio. Sigue en su cariño, en la lluvia y el sol, en el pan y en el hogar, en cada niño que nace y en la fidelidad de unos esposos que se aman con locura.

Dios no se cansa de amarnos, de buscarnos, de caminar a nuestro lado. Es verdad que a veces el mal parece tan grande que nos olvidamos de su amor, que pensamos en su silencio como si fuese debilidad o impotencia.

La Unción de los Enfermos

La Unción de los Enfermos s un sacramento de enfermos; la enfermedad ha de entenderse como física, pero no hay que olvidar que el mal físico es una cuestión del hombre entero ante Dios. El sacramento es dirigido al cristiano que sufre una enfermedad seria y que está ante Dios su Señor y Salvador, para este momento instituyó Cristo la Unción de los enfermos. La finalidad de la Unción de los Enfermos es ayudar al enfermo a vivir cristianamente su período difícil.