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Calvos, vacunas, y buen humor

Hace muchos años le oí decir a un gran señor al que admiro por muchos motivos, y que ahora está en el Cielo, que Dios había hecho cabezas perfectas, y a otra les había puesto pelo, y conversando hace poco con unos amigos sobre los diferentes tipos de calvicie, o en su caso, de cómo manejamos los calvos nuestras “cabelleras”, pudimos hacer una somera clasificación:

1. Calvo foco, o bola de billar.

2. Calvo corona de laureles.

3. Calvo con entradas.

4. Calvo con entradas que van de salida.

Cadaunadas

¿Quién no ha escuchado a algún adolescente quien sincerándose y en tono triste haya dicho: “es que mis papás no me entienden”. Otros incluso llegan a decir: “es que la traen contra mí”, confesando que estas ideas hieren sus inteligencias y, sobre todo, sus corazones.

Cada quien su religión

Hace poco leía -aunque no recuerdo dónde- una frase que llamó mi atención, y me hizo reflexionar en una realidad de vital importancia: “cada quien tiene su propia religión”. Si Ustedes, queridos lectores me tienen un poco de paciencia, les diré porqué estoy total y absolutamente de acuerdo con esta afirmación, para lo cual necesito ir por pasos. Comencemos, pues echando un vistazo, a vuelo de pájaro, sobre el ambiente en el que vivimos.

Crímenes cobardes

Cuando estaba terminando mis estudios preuniversitarios en la Escuela Preparatoria número 4, de Tacubaya, precisamente en 1968, estalló el famoso movimiento estudiantil. Recuerdo que un día salimos del auditorio a “tomar camiones” para ir a la “Prepa 5” , pues los dirigentes de la porra así lo decidieron en una asamblea general. Como muchos otros, me dejé llevar por la ley del rebaño e hice lo que solo nunca hubiera hecho: detener un autobús lleno de pacíficos y asustados pasajeros y obligar al chofer a que nos llevara a nuestro destino.

Conversión de un ateo

En Italia se acaba de publicar un “libro-entrevista” donde el dueño de la casa editorial más poderosa del país -Editrice Mondadori- declara públicamente su conversión, dando un giro: de ateo radical a católico coherente. El nombre del empresario: Leonardo Mondadori. El título del libro: “Conversione. Una storia personale”, del cual se han vendido 30.000 ejemplares en pocos días. Este testimonio de fe ha supuesto, indudablemente, un fuerte golpe en el ambiente liberal de la cultura italiana.

Contigo aprendí

Hace poco tuve el gusto de coincidir con uno de esos señores de los que aprendí mucho cuando era joven. Dado que los años han ido dejando su huella en los dos, resultaron evidentes los cambios en las carrocerías; sin embargo, gracias a Dios, he podido comprobar que hay personas quienes, al igual que los buenos vinos, mejoran con el tiempo. Don Ignacio Campero sigue siendo ese “señorón” al que he admirado por años.

Con la voluntad a la baja

Qué feo se siente querer y no poder. Me vienen a la memoria unas palabras de Pablo de Tarso cuando declara: “hago el mal que no quiero”, y cuántas veces he de reconocer que a mi me pasa lo mismo todos los días. Triste realidad tener que reconocer que nuestra voluntad está a la baja.