Pasar al contenido principal

C

La Civilización Cristiana, ¿es una utopía?

La civilización cristiana no es una utopía. Es algo realizable, que en determinada época floreció. Algo, en fin, que duró en cierta manera aun después de la Edad Media, hasta tal punto que el Papa San Pío X pudo escribir: “No, la civilización no está por inventarse ni la ciudad nueva por construirse en las nubes. Ha existido, existe, es la civilización cristiana, es la ciudad católica.

Un cuerpo incorrupto

El pequeño Mario Ángel viajó con sus papás, Celia y Felipe a Europa para visitar a una de sus tías. Ella había ingresado con las Hermanas de la Caridad, en una comunidad de religiosas en Nevers, Francia. Cuando el niño llegó al lugar se quedó admirado porque en la iglesia del convento observó que se mostraba el cuerpo de una joven mujer a través de una urna de cristal. Mario comentó: “Es como el cuento de Blanca Nieves” Y luego preguntó: “¿Está dormida esperando que un príncipe la despierte con un beso?”. Celia se sonrió y le dijo: “¡No! Es Santa Bernardita.

¿Cómo te gustaría morir?

Puede sonar un tanto macabra, si no tétrica la pregunta, pero en cualquier caso no es vana; es más, es conveniente plantearse el problema de la muerte, si queremos tener una vida auténtica (en expresión de Martin Heidegger). Para darle el justo valor y medida a esta vida es imprescindible considerar el término de la misma, es decir, la muerte: el modo de vivir, de aprovechar el tiempo, de valorar las cosas, personas y sucesos varía en atención a esta variable ineludible, que con facilidad tendemos a olvidar, quizá por temor, indolencia o comodidad.

Cumpí 45. ¡Qué trauma!

Hace poco me decía un familiar: -Te das cuenta, ya cumplí 45 años. ¡Es horrible! Ya me estoy acercando a la edad de las arrugas, las canas, las "patas de gallo", la papada, la barriga de viejo, la edad de los achaques... ¡Sencillamente no lo puedo soportar!

Después, en tono más confidencial, me preguntaba: -Tú crees que cuando cumpla 50, ¿debo de pensar en hacerme cirugía plástica?

Corridos de narcos, ¿sí o no?

Se ha desatado una polémica sobre la prohibición o aceptación de los llamados “narcocorridos” en las emisoras de radio de carácter público. No importa, en esta discusión, quién es el que prohíbe y quién el que propone la difusión de los corridos de narcos. Importa la repercusión social de estas piezas, digamos, musicales. Y es en este punto donde centraré mi comentario.

El cuidado en los pequeños detalles-Hacer el bien, hace bien.

1) Para saber
Una tarea suele valorarse por los resultados que se obtienen. Es lógico que importen los resultados. Sin embargo, no se puede olvidar que el principal beneficiado por un trabajo bien hecho es la misma persona que lo hizo, independientemente de los resultados. Se ha hecho una mejor persona. Pero también sucede lo contrario: cuando alguien realiza una mala obra, él mismo se hecho una peor persona.
Importa que toda actividad, por pequeña que sea, la hagamos bien y, por lo regular, también los resultados saldrán lo mejor posible.

La Cruz de Neón

Durante la década de los 80s (siglo XX) en Perú existió un grupo terrorista llamado “Sendero luminoso” de filiación maoísta. Muchos años hubo cruentos asesinatos y destrucción por todo el país. Finalmente el cabecilla del movimiento cayó y el grupo desmantelado. Con restos de atentados a torres de comunicación: hierro, material destruido, etc., se construyó una cruz gigantesca, que se iluminó de neón y se colocó en la bahía de Lima.