Pasar al contenido principal

Paz

Paz 

 

¡ Señor !
¡ Colma de esperanza mi corazón
y de dulzura mis labios!
Pon en mis ojos la luz que acaricia y purifica,
en mis manos el gesto que perdona.

Dame el valor para la lucha,
compasión para las injurias,
misericordia para la ingratitud y la injusticia.

Líbrame de la envidia
y de la ambición mezquina,
del odio y de la venganza.

Y que al volver hoy nuevamente
al calor de mi lecho, pueda,
en lo más íntimo de mi ser,
sentirte a Tí presente.

Amén.