Oración de un joven
Oye, Jesús:
Yo casi nunca recé por mi grupo juvenil.
Ultimamente las cosas
no están yendo muy bien
debido a unos chismecitos que surgieron
y que uno no supo evaluar.
Estamos afectados
por una serie de problemitas,
y lo que es peor,
no sabemos enfrentar todo eso con caridad.
Ellos son buenos, Jesús,
pero nuestra inexperiencia
hace que las cosas se precipiten.
Ha habido peleas, chismes,
noviazgos apresurados e inmaduros,
conversaciones poco convenientes,
rebeliones innecesarias
y nuestra comunidad,
que iba tan bien,
está en una época de retroceso.
Eso no es nada agradable para
Ti que contabas con nosotros.
Y creo que aún nos queremos.
Nos queríamos mucho todos
pero está ocurriendo una serie de cosas
que no tendrían por qué ocurrir.
No tendrían por qué ocurrir en absoluto.
Ya hemos intentado
todos los trucos de reunión de grupo,
de dinámica, de creatividad
y qué sé yo qué mas.
Creo que lo que está haciendo falta eres Tú.
Vine a pedirte que Tú hagas
lo que esas técnicas no pueden lograr.
Ayúdanos porque va a ser terrible
comenzar todo de nuevo.
Tú merecías algo más que una derrota
como ésta.
A ver si nos das una manita, porque sin Ti
somos una porción de ceros juntos.
No valemos gran cosa,
para no decir
que somos una perfecta negación.
Adiós y buena suerte
para nuestra tentativa de progreso
y unión del domingo próximo.