Reflexiones de Un Misionero Ante una Mujer Moribunda
Reflexiones de un Misionero Ante una Mujer Moribunda
Reflexiones de un Misionero Ante una Mujer Moribunda
Quiero partir este retiro con esta cita de un escritor francés: "Siempre que asisto a una misa quedo sobrecogido pensando en ese hombre misterioso que se confunde en el altar con Dios. Lleno de temblorosa admiración se me doblan las rodillas e inclino la cabeza hacia el suelo. Me parece recibir un torrente de luz sobre mi alma. Me siento transportado a un mundo sobrenatural. Busco al hombre y encuentro sólo al ministro de Dios" (PAUL CLAUDEL).
Todos los domingos, en las primeras horas de la mañana, en la 2 de TV, y antes del programa “Ultimas preguntas”, se abre una ventana a la catolicidad de la Iglesia, con la presentación de interesantes reportajes misioneros.
El domingo (17 / 04 / 05) versó sobre los misioneros combonianos y su magnífica tarea de promoción y evangelización en Kenia. Digna de todo elogio la tarea, que sin apenas medios económicos, ni siquiera del Gobierno, están realizando estos misioneros a favor de los más pobres.
Diversos medios han difundido la noticia de que en la catástrofe de N.Orleans, un misionero español, el P. Teodoro, ha permanecido en su parroquia con casi todos sus fieles, durante todo el tiempo del tifón, animándoles y prestándoles toda suerte de servicios.
Noticias como ésta, no deberían ser presentadas como algo insólito.
Poca gente ignora que, de entre las cosas estupendas, buenas o menos buenas que tiene la Iglesia católica, una de las mejores y más admirable, es el ejército de millares de misioneros y misioneras, que por todo el mundo,
han entregado sus vidas a la causa de la evangelización y promoción humana de los más pobres y necesitados de la tierra.
En una palabra: AUTOFORMACION. Formación en todos los campos: espiritual, intelectual, humano y apostólico.
Petición: Señor, consciente de que soy líder de líderes, ayúdame a formarme a fondo en todos los campos, con la ayuda de mis formadores.
Fruto: Aprovechar con avaricia estos años de siembra silenciosa para formarme un sacerdote de alta calidad.
I. FORMACION ESPIRITUAL
¿Qué cimientos estás poniendo en su vida?
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No podemos acabar este retiro sobre el sacerdocio sin lanzar nuestra mirada a la Madre del primer Sacerdote, a quien engendró, alimentó, educó y formó con su cariño, con su fe y con su amor. Ella también quiere ir forjando en mí las virtudes propias de un sacerdote.
C.L. Contemplar a María en el Calvario.
Petición: María, alimenta mi sacerdocio con tu cariño y protección, forja en mí las virtudes de tu Hijo sacerdote.
Cristo Pasa a la Ribera de tu Vida
Tu vocación no tiene nada que ver con 'tus defectos, imperfecciones o caídas. Jesucristo no llama a los santos, a los puros, a los indefectibles. Según nos dice el Evangelio, llama a quien quiere y entre esos encontramos a unos mejores y a otros peores, a todos llenos de miserias y defectos.
La vocación es un don gratuito y no un premio a los méritos. Por ello, no te apoyes en tus fallos e imperfecciones para poner en duda el llamado de Dios.
ATRACCIÓN HACIA JESÚS