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Navidad

El sendero divino

   Para que una persona que busque dentro de cierto recogimiento que Dios se haga presente de forma un tanto más latente, deberá seguir la propia metodología que que Dios marcó para su propio nacimiento. Esta metodología conlleva un plano introductorio que consiste en una afanosa vida de Oración, que aunque como confesó la Madre Teresa de Calcuta en una de sus cartas, ¨no sentía nada cuando estaba en el Sagrario¨; la propia disciplina de Oración, solamente genera el terreno básico para abonar el camino de esa deseada presencia.

Tradición: un valor que “hace” a la familia

Tradición: un valor que “hace” a la familia

Sin duda los mexicanos somos un pueblo que atesora sus tradiciones. Esto nos viene desde nuestros antepasados indígenas, que apreciaban mucho sus “raíces” y, ciertamente, también nuestros antepasados españoles eran un pueblo con mucho apego a sus tradiciones. En otros ámbitos, como lo social, lo religioso y hasta en lo estético, las tradiciones tienen un elevado lugar en nuestra jerarquía de valores.

¿Qué significa la Navidad?

A veces, de tanto hacer algo, se nos olvida porqué lo hacemos o para qué sirve. Algo así nos puede pasar con la Navidad. Tanto nos la promueven, tanto nos la recuerdan los medios y la publicidad, que corremos el riesgo de olvidar o, por lo menos, diluir su significado. Por eso, vale la pena detenernos un momento y recordar que significa esta fecha y de qué manera la estamos viviendo.

¿Qué Niño es este?

En estas navidades, vuelven a salir a relucir los hermosos villancicos; sencillos y a veces ingenuos recordatorios del acontecimiento que divide la historia de la humanidad en dos partes: antes y después del nacimiento de este Niño, sencillo y humilde, que es nuestro Señor y Creador.

Uno de ellos, un villancico inglés que, según algunos viene del siglo X, pero con toda seguridad se imprimió a partir  del siglo XVI, se titula, ¿Qué niño es este? Una traducción libre del villancico empieza así:

Navidad

Navidad

En Japón, también celebran la Navidad en las mismas fechas, se darán regalos, y tendrán una hermosa y rica cena… sin embrago Jesús no será el centro de la Navidad. En los días previos a la Navidad, es fácil verse envuelto en el consumismo y en el activismo. Las prisas por comprar regalos, los últimos detalles de la fiesta o de la cena de Navidad nos pueden llegar a hacer perder de vista qué es lo que estamos celebrando o cuál es el verdadero motivo de nuestras compras, de nuestros regalos, de nuestra cena.