Cuaresma para todos
¿Eres de la generación de los rebeldes? Sí. Eres joven y estás orgulloso de ello. Pero, y la rebeldía, ¿por qué?
¿Eres de la generación de los rebeldes? Sí. Eres joven y estás orgulloso de ello. Pero, y la rebeldía, ¿por qué?
La prensa internacional ha dedicado sendos espacios a la aparentemente novedosa noticia del descubrimiento de un evangelio que tendría a Judas Iscariote como autor. ¿Qué es este manuscritos? ¿De qué trata? ¿Por qué ha suscitado tanto interés? ¿Qué consecuencias tiene?
1. ¿QUE ÉS?
Pbro. José Martínez Colín
Terminada la Cuaresma, volvimos a tener más presente los acontecimientos que nos trajeron el perdón de nuestros pecados y, con ello, la oportunidad de alcanzar nuestro destino último: la gloria del Cielo. Recibí un relato que nos puede ayudar a reflexionar al respecto.
El cuento de la piedra preciosa
En su mensaje para la cuaresma de este año, el Papa Benedicto XVI nos recuerda que es un tiempo para «entrenarnos» espiritualmente mediante la práctica de la limosna. De esa manera podemos crecer en la caridad y reconocer en los pobres a Cristo mismo.
¡Queridos hermanos y hermanas!
02/08 Domingo 10 de febrero 2008
El Viernes Santo
En este día la Iglesia celebra la gloriosa Pasión de Jesús, Su Muerte victoriosa. Destaca como símbolo de salvación la Cruz del señor.
La Misa Crismal que celebra el obispo con todos los presbíteros de la diócesis, es una de las principales manifestaciones de la plenitud sacerdotal del Obispo y como signo de la unión estrecha de los presbíteros con él. En ella se consagra el Santo Crisma y se bendicen los óleos de los catecúmenos y de los enfermos.
El Santo Crisma, es decir el óleo perfumado que representa al mismo Espíritu Santo, nos es dado junto con sus carismas el día de nuestro bautizo y de nuestra confirmación y en la ordenación de los diáconos, sacerdotes y obispos.
Toda la Cuaresma, con su constante invitación a la conversión, es un hermoso
recordatorio de cómo Dios nuestro Señor nos quiere, a todos y cada uno de
nosotros, plenamente santos, absolutamente santos. “Purifíquense de todas sus
iniquidades, renueven su corazón y su espíritu, dice el Señor”.