Pasar al contenido principal

Padre Miguel Rivilla San Martín

Ad petendam pluviam

 

En España hay una terrible sequía tanto de lluvia como de fe y oración.

Vamos comprobando la limitación humana, incapaz de remediar la carencia de agua en todas las regiones de la nación. Dentro de poco -si el cielo no lo remedia- y el Gobierno no decreta una solución solidaria y justa, puede

ser la sequía el problema prioritario y más angustioso para millones de españoles.

Adopciones por homosexuales

Adopciones por homosexuales

El colectivo gay camina imparable hacia su meta. En nombre del progreso nos preparan una sociedad irreconocible .Paso a paso configuran, desde ya, con la indiferencia de la mayoría, un futuro donde el matrimonio tradicional será rara avis. La adopción de niños por este colectivo es ya un hecho. La autonomía asturiana es pionera en el asunto. Todo apelando y en nombre de los derechos humanos. Los derechos de ellos, naturalmente. Pero ...¿los niños tienen o no, algún derecho?.

Agnósticos

Agnósticos

Llama la atención el comprobar el desparpajo, la naturalidad y hasta la franqueza con que ciertas personas se presentan ante los demás como agnósticas. Por lo visto y oído, hoy está bastante de moda el pasar de religión ante los demás.

Desconozco si será o no una moda pasajera, pero lo que se constata es la decisión y alarde que muestran ciertos individuos, más bien cultos, tanto en público como en privado, al definirse a sí mismos como agnósticos en materia religiosa.

Alrededor de la mesa

Alrededor de la mesa

La Iglesia comenzó el primer jueves santo, alrededor de la mesa donde Jesús instituyó la Eucaristía, consagrando el pan y el vino y mandando a sus apóstoles:”Hacer esto en memoria mía”.Veinte largos siglos lleva la comunidad cristiana actualizando el mandato de Cristo en todas partes y haciendo presente al Señor sacramentado alrededor de la mesa del altar.

Como muy bien ha dicho el Papa : “ la Iglesia hace la Eucaristía y la Eucaristía hace la Iglesia”.

Alerta, cristianos

Alerta, cristianos

 

 

Hoy más que nunca los cristianos necesitamos vivir espabilados. Las señales que la Biblia dan ante la llegada del Señor, se están realizando ante los ojos de todos. La confrontación entre el bien y el mal, está más acentuada que nunca en la historia individual y global.

El ataque a los valores esenciales cristianos aumentan en progresión, extensión y gravedad. La figura fundamental de Cristo es hábil y sutilmente atacada en muchos medios y de mil modos, con el fin de difuminar, confundir y negar su divinidad.

Ama y haz lo que quieras

 

Esta frase de S. Agustín, correctamente entendida y practicada, encierra en sí, el meollo de todo el mensaje cristiano. En efecto, nadie que ame de verdad, podrá nunca obrar mal ni respecto a Dios, a quien obedecerá en todo, ni respecto al prójimo a quien respetará profundamente.

Verdadero camino de libertad

No son muchas las personas creyentes e incluso practicantes, que enfocan correctamente los mandamientos de la Ley de Dios. Una gran mayoría sólo ven en ellos –quizá fruto de una desacertada educación o catequesis -prohibiciones, vetos, exclusiones, preceptos negativos, obstáculos a su libertad etc.. De aquí suele brotar, frecuentemente, una conciencia transgresora, culpabilizadora, achatada y sin apenas horizontes. Nada más incorrecto.