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real

Los pobres y la boda real

Son los de siempre. Los que no cuentan, los que no tienen voz ni voto, los marginados de la sociedad, los que ni tienen familia, vivienda, ni donde dormir y a veces, carecen hasta de un plato caliente o un pedazo de que llevarse a la boca. Son los machacados por la vida.

El Evangelio y los curas dicen que son los preferidos de Dios. Otros muchos decimos además, que son los olvidados de los hombres.

Lo virtual y lo real

La experiencia la hemos pasado gran parte de los mortales. Estábamos viendo un filme apasionante, cuya trama nos había captado de pies a cabeza.

Sentados cómodamente en la butaca, vivimos, durante dos horas, inmersos en los personales avatares de los protagonistas del filme. Sufrimos, nos emocionamos y hasta disfrutamos en una virtual personalidad, ajena a la

nuestra. Al concluir el filme, recuperamos nuestra personalidad real .

Volvimos a ser nosotros mismos, atados a la realidad cotidiana y circundante. Eso fue todo.

Corona Real

La corona que ha portado la reina Isabel II en la ceremonia de apertura del Parlamento británico,-por encima del protocolo y pompa de la monarquía,- parece algo obsoleto y “demodé”.

Hace lustros, el vicario de Cristo en la tierra, S.S el Papa, que portaba la tiara, ( tres coronas ) en las grandes solemnidades, supo prescindir de esta señal de poder y boato, con aprobación generalizada.

El hecho de que la reina tenga que cargar con la pesada corona, cuajada de

El hijo soñado y el real

La historia de este “ángel” que se llama Gianluca comenzó así… Había nacido espléndido. Crecía, dormía como todos y sonreía más que todos. Era la alegría de la familia. Pero a escasos cinco meses de su nacimiento sus papás percibieron en él ciertos movimientos extraños. Nadie supo explicarles el porqué. Después de algunos análisis médicos, los doctores concluyeron que se trataba de epilepsia. Gianluca alojaba en su diminuto cuerpecito el síndrome de West, uno de los más graves que acechan el primer año de vida.