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Señor

Rejuvenecer como las águilas

Rejuvenecer como las águilas

Las águilas suelen vivir alrededor de 25 ó 30 años. Al alcanzar esa edad, entran en una etapa en la que sus plumas comienzan a caer, y su gastado y encorvado pico ya no sirve. No pueden luchar contra el frío de las cumbres durante el invierno por la pérdida de su plumaje, y también pueden morir de inanición. Llegado ese momento, las águilas pueden dejarse morir, pero hay otra opción.

La web abandonada

Era marzo.  Entré a visitar aquella página web.  La portada, muy atractiva.  El mapa del sitio, muy lógico.  Un lapicito simpático aparecía y desaparecía en la esquina superior derecha.  En un golpe de ojo te quedaba claro qué era aquella organización, cuál era su visión y cuál su misión.  Seguí navegando.  Me topé con un anuncio: “¡Ayúdanos a ayudar, adquiere ya nuestras tarjetas navideñas”.

 

Domingo, día del Señor y día de la familia

Parece mentira, pero a pesar de tanto "tiempo libre" no tenemos casi tiempo para nada. Aumentan las necesidades, los planes, los compromisos, y cuando queremos tener un rato para el descanso en familia, resulta que no nos queda tiempo...

Debemos sentarnos, de vez en cuando, para reflexionar sobre lo que sea realmente importante en nuestras vidas. Entonces descubriremos, entre otras cosas, que resulta urgente rescatar el sentido del domingo, de un día dedicado a los demás, a nosotros mismos, a Dios.

Nos acercamos a Ti, Señor

Nos acercamos a Ti, Señor

Son incontables los caminos que nos acercan a Cristo. Muchos están reflejados en el Evangelio, con sus escenas sencillas de encuentros decisivos.

Unos van a Cristo llevados por la curiosidad. Desean saber qué dice y qué hace este personaje venido de un poblado casi desconocido de Galilea.

Otros van a Jesús deslumbrados por su fama, tal vez con el deseo de pedir un milagro. Gritan, suplican, lloran, se ponen a los pies del Maestro. No dejan de insistir hasta que no consigan una curación, un milagro, un cambio profundo en sus vidas.

Domingo, día del Señor y día de la familia

Parece mentira, pero a pesar de tanto “tiempo libre” no tenemos casi tiempo para nada. Aumentan las necesidades, los planes, los compromisos, y cuando queremos tener un rato para el descanso en familia, resulta que no nos queda tiempo...

Debemos sentarnos, de vez en cuando, para reflexionar sobre lo que sea realmente importante en nuestras vidas. Entonces descubriremos, entre otras cosas, que resulta urgente rescatar el sentido del domingo, de un día dedicado a los demás, a nosotros mismos, a Dios.

Déjame esperar, Señor

Señor, te agradezco el sol, el viento, la sonrisa de una madre, el canto del jilguero. Te agradezco las horas de alegría con los míos, los ratos de trabajo y de esfuerzo. Te agradezco la salud con la que me permites trabajar por mis hermanos.

Pero a veces, Señor, la vida nos sorprende. Nos hieren las angustias de los hombres, la injusticia, el hambre de los niños, el llanto de los viejos.

"Bendito el que viene en nombre del Señor"

Atenuado un tanto ya el gran boom mediático de los eventos vaticanos, que fue la enfermedad, muerte y sepelio del inolvidable papa Juan Pablo II, con repercusión global, se nos ha venido encima otro acontecimiento de no menor trascendencia, cual ha sido el Cónclave y la posterior elección, como nuevo Papa, sucesor de Pedro y vicario de Cristo, del cardenal alemán, Joseph Ratzinger .Personalmente y bien motivado, eligió el nombre de Benedicto XVI.

La Resurrección del Señor

1-Es el NUCLEO fundamental de la fe cristiana

2-Es el ACONTECIMIENTO mayor de la historia de la salvación.

3-Es la FIESTA principal de los cristianos, antes que cualquier otra.

4-Es el ARTÍCULO esencial del Credo.

5-Es el CIMIENTO de nuestra esperanza tras la muerte.

6-Es la META personal a la que todos somos llamados.

7-Es el DÍA en que actuó el Señor,

8-Es el REGALO mayor de Dios a la Humanidad

9-Es  la VICTORIA  más rotunda sobre el Mal y la Muerte.