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gracia

Perdí mi virginidad

"Perdí mi virginidad"

 

Mi historia es dolorosa de compartir, pero quiero que conozcas lo que me ocurrió para que no vayas a ser lastimada como yo. Tenía 23 años y siempre había planeado ser virgen al casarme. Soñaba con andar por la nave de la Iglesia con un vestido blanco, signo de mi pureza y del regalo que daría a mi esposo. Esto era muy importante para mí y me ayudó a permanecer fuerte por mucho tiempo. Ojalá que hubiera perseverado, pero no fue así.

 

Se lo dije a mis padres...

 

Gracia y purgatorio

Gracia y purgatorio

El objetivo final del hombre es "alcanzar la estatura del varón perfecto que es Cristo", esto es la santidad total. Cuando el hombre peca no solamente se hiere, llegando incluso a destruirse o a destruir a los demás, sino que como efecto colateral retrocede (si podemos llamarle de esta manera) en su camino de santidad. Cuando nos reconciliamos con Dios por medio del sacramento de la Reconciliación, restablecemos la armonía en nosotros, con Dios y con los demás. La gracia sana nuestras heridas y se abre de nuevo el camino hacia la santidad.

Exigencias de la Vocación

I.- * El Desprendimiento. 

"Cuando iban en su camino, alguien le dijo: "Señor, te seguiré a donde quiera que vayas". Jesús le respondió: "Las raposas tienen guaridas, las aves del cielo nidos, pero el Hijo del hombre no tiene dónde reclinar su cabeza 

A otro le dijo Jesús: "Sígueme". Este respondió: "Señor, permíteme que vaya primero a enterrar a mi padre". Replícole Jesús: "Deja a los muertos que entierren a sus muertos; tú, ve y anuncia el reino de Dios".