Hosanna Heysanna Sanna Sanna Ho
Sanna Hey Sanna Ho Sanna
Oh Jesús, Jesús, estoy aquí por ti
Sanna Ho Sanna Hey Mi Señor
Porque están aquí en la multitud.
Nada detendrá lo que suceda;
no habrá silencio aunque se callen de una vez,
el ruido seguirá, hasta el final.
Hosanna Heysanna Sanna Sanna Ho
Sanna Hey Sanna Ho Sanna
Oh Jesús, Jesús, ¿lucharás por mí?
Sanna Ho Sanna Hey Mi Señor
Canten su canción, no solo por mí,
canten por ustedes, son benditos.
1. Para saber
Había una vez un campesino chino, pobre pero sabio, que trabajaba la tierra duramente con su hijo. Un día el hijo le dijo: “¡Padre, qué desgracia! Se nos ha ido el caballo”.
“¿Por qué le llamas desgracia? –respondió el padre– veremos lo que trae el tiempo...”
Justo a la mitad de la meta se han reunido en Roma 50 jefes de estado para asistir a la sede de la FAO a fin de acudir a la Conferencia de Alto Nivel sobre la Seguridad Alimentaria Mundial “Los Desafíos del Cambio climático y la Bioenergía” del 3 al 5 de junio.
Para hacer las cosas bien
hay que hacerlas suave.
Día a día, piedra a piedra
hasta llegar al cielo. (bis)
Mano a mano, cantaremos
corazón a corazón. (bis)
El trabajo se hace simple
si la paz existe. (bis)
Escucha, hermano la canción de la alegría
el canto alegre del que espera un nuevo día.
Ven, canta, sueña cantando,
vive soñando el nuevo sol;
en que los hombres volverán a ser hermanos.
Busca en tu vida un nuevo rumbo de alegría
para que juntos canten todos de alegría.
Siempre con fe has de buscar la amanecida
en que los hombres cantarán con alegría.
Siembra en la vida una nueva melodía
que aquí en la tierra has de encontrar el nuevo día.
Danos un corazón grande para amar
danos un corazón fuerte para luchar.
Hombres nuevos, creadores de la historia
constructores de nueva humanidad,
hombres nuevos que viven la existencia,
como riesgo de un largo caminar.
Danos un corazón grande para amar
danos un corazón fuerte para luchar.
Hombres nuevos, luchando en esperanza,
caminantes, sedientos de verdad;
hombres nuevos, sin frenos ni cadenas,
hombres libres que exigen libertad.
Himno del misionero
Señor, toma mi vida nueva,
antes de que la espera
desgaste años en mi.
Estoy dispuesto a lo que quieras,
no importa lo que sea,
Tú llámame a servir.
Llévame donde los hombres
necesiten Tu palabra,
necesiten mis ganas de vivir;
donde falte la esperanza,
donde falte la alegría,
simplemente, por no saber de Ti.
Canta y alaba al Señor
Él nos ha dicho su nombre
Padre y Señor para el hombre
Vida, esperanza y amor
Canta y alaba al Señor
Hijo del Padre, hecho hombre
Cristo Señor es su nombre
Vida, esperanza y amor
Canta y alaba al Señor
Divino don para el hombre
Santo Espíritu es su nombre
Vida, esperanza y amor
Hoy, perdóname, hoy, por siempre;
sin mirar la mentira,
el vacío en nuestras vidas,
nuestra falta de amor y caridad.
Hoy perdóname, hoy por siempre;
aún sabiendo que he caído,
que de ti siempre había huido,
hoy regreso arrepentido, vuelvo a Ti, vuelvo a Ti.
Hoy llegamos a casa, Señor
a entonar el amor en canción,
porque Tú llenas de gozo la vida,
porque nos enseñaste a vivir.
Aleluya, Aleluya.
Tus palabras queremos oír,
recibir tu verdad, tu calor
y llevar un ritmo feliz a la vida,
construir un mundo mejor.
Es tu ley un mandato de amor,
es mensaje de paz y perdón,
es misión, lucha que empeña la vida,
es el grito de fe juvenil.