UN GRAN DÍA
Qué limpios y entusiastas son los días
en que alma y cuerpo despiertan
al mismo tiempo y con todo el vigor.
Un poco de confianza
te basta cada mañana
para convertir un nuevo
día en un gran día.
Y si a la confianza unes el entusiasmo,
tanto mejor.
Todos lo días son buenos
si aprendo a colocarlos
en las manos de Dios.