Juventud del alma
Me siento muy contento,
y bastante sorprendido,
experimentando
dentro de mi vieja piel,
la juventud que no tuve,
cuando era la hora.
Hoy vivo la primavera del alma,
y tengo las risas que fueron
tormento interior.
Hoy disfruto de la vida
y de las cosas que no disfruté.
Hoy tengo el derecho,
y el firme propósito,
de vivir hasta el final
una inmarcesible juventud.