El Sacramento del Perdón
El Sacramento del Perdón
En su libro El secreto del Padre Brown, dice Chesterton: “No existe un hombre que sea realmente bueno mientras no sepa con exactitud cuan malo puede llegar a ser” (p. 17 Plaza Janes).
El Sacramento del Perdón
En su libro El secreto del Padre Brown, dice Chesterton: “No existe un hombre que sea realmente bueno mientras no sepa con exactitud cuan malo puede llegar a ser” (p. 17 Plaza Janes).
El narcisimo de los jóvenes
Los adultos han hecho de todo para que no les falte nada a sus hijos,
inducen a los jóvenes a que crean que tienen que satisfacer cada uno de sus deseos, confundiéndolos con la necesidad.
¿Es educativa esa manera de proceder?, ¿qué tipo de personalidad deseamos formar?
Miguel de Cervantes decía:
“es de vidrio la mujer,
pero no se ha de probar
si se puede o no quebrar,
porque todo podría ser”
—Fulanita, dame una prueba de amor-, dijo un joven.
— Si te casas conmigo no te doy una prueba, sino muchas. Si me amas, sabrás esperar a que estemos preparados para casarnos.
— Es que quiero saber si nos acoplamos, responde el joven.
Hay veces en que prometemos sin saber a lo que nos comprometemos. Es muy fácil, cuando uno es joven y está sano decir y prometer que estaremos con nuestro cónyuge, con nuestra familia en la salud y en la enfermedad. Luego, los años pasan, la enfermedad llega, poco a poco a veces, otras veces con fuerza y por sorpresa. Entonces nos damos cuenta de que lo que prometimos no era poca cosa; que la enfermedad es una de las pruebas más fuertes para el amor.
De que es importante no tienes que convencerme. El asunto es ¿qué hacen, o qué hacemos, los que hemos nacido con menos voluntad?
La voluntad crece con su ejercicio continuado y cuando se va entrenando en direcciones determinadas. Y eso sólo se logra venciendo en la lucha que -queramos o no- vamos librando de día en día.
-Oiga Padre: ¿Desde qué edad se puede tener novio?
-Pues; desde los 8 años.
-¿Y es pecado darse un beso?
-Mira. Te voy a contestar con una fórmula de Teología Moral que te dejará muy claro si es pecado o no: “Pos, a según”. ¿Verdad que te quedó claro?
Robyn Bowen es una mujer de Washington que en 1980 acudió a una Clínica en Rochester para ser atendida de una enfermedad al riñón mientras estaba embarazada. Recuerda cómo los doctores le dijeron que llevar el embarazo hasta el final podría perjudicarle e incluso ponerse en peligro de muerte. Pero ella no quiso abortar, no dudó: "Supe desde el primer día que Dios me había bendecido al permitirme tener a Brandon", que así llamó a su hijo.
Hay dos grandes tipos de virtudes: las infusas y las naturales. Las primeras las da Dios directamente y las segundas son el resultado de un continuo repetir actos buenos. Dentro de las virtudes infusas hay una subdivisión más: por una parte están las virtudes teologales y por otro las cardinales.