Dia tras dia, mi Señor
Dia tras dia, mi Señor
Día tras día, mi Señor,
te voy a pedir tres cosas:
verte más claramente,
amarte más tiernamente
y seguirte más fielmente.
Día tras día, día tras día, Señor...
Amén.
Día tras día, mi Señor,
te voy a pedir tres cosas:
verte más claramente,
amarte más tiernamente
y seguirte más fielmente.
Día tras día, día tras día, Señor...
Amén.
Te adoro, Dios mío,
y te amo con todo el corazón.
Te doy gracias por haberme creado,
hecho cristiano y conservado
en esta noche.
Te ofrezco las acciones del día;
haz que sean todas según tu santa
voluntad y para tu mayor gloria.
Presérvame del pecado y de todo mal.
Que tu gracia esté siempre conmigo
y con todos mis seres queridos.
Amén.
Señor y Dios mío: creo que estás presente en todo lugar; que estás aquí, dentro mío; que me ves; que me oyes.
Te adoro con profunda humildad y reverencia. Te pido perdón por mis pecados.
Y, aunque soy indigno de presentarme delante tuyo, confiado en tu infinita misericordia, te pido ayuda para hacer con provecho este rato de oración, que ofrezco a tu mayor gloria.
Amén
¡Padre Santo! te pedimos por los jóvenes,
que son la esperanza del mundo.
no te pedimos que los saques de la corrupción
sino que los preserves de ella.
¡Padre! No permitas que se dejen llevar
por ideologías mezquinas.
que descubran que lo más importante
no es ser más, tener más, poder más,
sino servir más a los demás.
¡ Padre! Enséñales la verdad que libera,
que rompe las cadenas de la injusticia,
que hace hombres y forja santos.
"Ven, Espíritu Santo,
inflama nuestro corazón
en las ansias redentoras
del Corazón de Cristo,
para que ofrezcamos de veras
nuestras personas y obras,
en unión con El,
por la redención del mundo.
¡Oh Señora mía!
¡Oh, Madre mía!
Yo me ofrezco del todo a ti
y en prueba de mi filial afecto
te consagro en este día,
mis ojos, mis oídos, mi lengua y mi corazón,
en una palabra, todo mi ser.
Ya que soy todo tuyo,
oh Madre de bondad, guárdame y defiéndeme
como cosa y posesión tuya.
Amén.
Oye, Jesús:
Yo casi nunca recé por mi grupo juvenil.
Ultimamente las cosas
no están yendo muy bien
debido a unos chismecitos que surgieron
y que uno no supo evaluar.
Soy joven, Se�or, y quiero vivir con fuerza y alegr�a;
soy joven y quiero estrujar mi vida y llegar hasta el fondo;
soy joven y, la verdad, Se�or, no s� lo que es vivir a veces;
soy joven y busco caminos, aunque no he encontrado el sendero cierto.
T� amas la vida, se�or Jes�s, y quieres al joven en pie, firme;
amas la vida y has roto las ataduras de la muerte, resucitando;
tienes Palabras de vida eterna para el coraz�n del hombre,
y le has dado el pan de vida para que camine con valor.
Señor, rocíame con la lluvia y estaré purificado;
límpiame y mi alma tendrá la blancura de la nieve.
En tu grandeza y misericordia, Señor, acuérdate de mi.
Concédeme tu ayuda y oye mi plegaria.
Que mi voz se eleve hacia a ti.
Escúchala y envíanos desde lo alto de los cielos
a tu Santo Ángel con el fin que cuide,
favorezca, proteja y defienda
a todos los habitantes de esta casa.
Yo te lo pido, Señor.
¡Así sea!
Señor y Dios mío, en quien creo, en quien espero, y a quien adoro y amo con todo mi corazón, te doy gracias por haberme creado, redimido y hecho cristiano. Te ofrezco mis pensamientos, palabras y obras de este día, para tu gloria, en penitencia por mis pecados y en sufragio de las almas del purgatorio. Te los ofrezco especialmente por eso que tú sabes que más me preocupa en este momento de mi vida. Dame tu gracia para servirte fielmente, y protégeme de todo mal. Amen.