Meditación
Sábado Santo
Tema:
La Santísima Virgen María: modelo de disponibilidad
Fruto - Petición:
María, Madre mía,
ayúdame a vivir siempre con el alma abierta a cuanto
Dios quiera pedirme, que mi mayor ilusión sea cooperar
con Dios en su obra de salvación. Que experimente la
alegría del dar y del darme; del vivir abierto a las
necesidades de los demás.
Puntos a Meditar:
1. Dios es siempre el
de la iniciativa.
" Al sexto mes fue
enviado por Dios..." Dios en su infinita providencia
escoge e invita a la criatura humana a cooperar con Él,
pero siempre le deja en total libertad para que vea,
examine, reflexione y decida. Ciertamente Dios parece
emocionarse al llamar a alguien a cooperar con Él y
espera, impaciente y respetuoso, la respuesta.
2. Respuesta del que
está disponible.
Quien está acostumbrado a
hacer sus gustos, a seguir siempre sus planes, quien es
calculador, racionalista; quien no ve las necesidades de
los demás ni las antepone a las suyas... muy
difícilmente podrá escuchar la llamada de Dios, y menos
dispuesto estará para seguirle. La Santísima virgen
escucha y responde rápidamente a Dios nuestro Señor.
Ella es una criatura disponible: no tiene planes
personales al margen de los de Dios; su voluntad es hacer
la voluntad de Dios; sus gustos son los de Dios. ¡Que
hermosa actitud ésta de la disponibilidad por lo que la
que la criatura da máxima gloria a Dios!
3. Fruto de la
disponibilidad.
" El Señor hizo en
mi maravillas". Puede decir María con la frente
levantada y llena de profunda humildad y gozo. Dios, en
efecto, le concedió ser única en la historia de la
humanidad: Madre de Dios y Corredentora. María fue una
mujer realizada en plenitud.