Ha sido experiencia universal de todos los exorcistas que se han dedicado a esta materia, observar que una vez que se distingue bien entre posesión e infestación, aparece de vez en cuando un tercer fenómeno distinto de los otros dos: los fantasmas. Los fantasmas son apariciones de personas que están en el purgatorio. Las características de estas apariciones son siempre las mismas y muy distintas de la infestación:
-el alma se aparece con forma humana
-no dice nada
-se aparece con carácter amenazante y terrorífico
Nunca mueve objetos, ni produce ruidos. Cuando se aparece se queda mirando, con cara de pocos amigos, y después desaparece sin más. Sabemos que no es un demonio porque además de que el fenómeno nunca va a más, desaparece si se dicen misas y oraciones por su alma. Esas apariciones son un modo de llamar la atención para que se rece por ella.