San Jorge viste de Prada
Siento defraudar a los incondicionales de Meryl Streep (a quienes me une la admiración por esta camaleónica actriz), pero no me estoy refiriendo a la secuela de su ya famosa película. ¡Nada sería más de mi agrado que ver de nuevo en la pantalla a la excéntrica Miranda Priestly! Más bien quisiera llamar la atención sobre una figura de nuestro panorama contemporáneo, que me parece es tan digno de ser aplaudida como lo es la actriz estadounidense detrás de las pantallas.