Escúchanos
Escúchanos
Escúchanos, Espíritu Santo,
tú que eres nuestro amigo.
Tú que estás siempre cerca de nosotros,
llena nuestros corazones de tu amor.
Te damos gracias, Oh Padre, porque,
cuando Jesús volvió contigo
Nos enviaste al espíritu Santo
para que ocupara su puesto..
Aunque no podemos verle,
sabemos que está actuando en el mundo,
en todo lo que es bueno y santo,
y en nuestras vidas para que cumplamos
tu voluntad.