Nuestro límite psicológico
Probablemente todos conocemos personas con corazón de monoblock. Individuos quienes parecen gozar maltratando a los demás. Cuando anoto el verbo maltratar no me refiero solamente a quienes golpean o insultan, sino también a quienes no saben “tocar” a sus congéneres como un maestro toca su instrumento favorito; con una delicadeza y respeto que nacen del aprecio, es decir, de conocer el precio o valor de lo que tienen en sus manos.