Preparar el nacimiento
En todo hogar cristiano que se precie suele haber un nacimiento. Hay todo un ritual para ponerlo: buscar las figuras guardadas en las cajas desde el año anterior, conseguir heno o musgo recientes, humedecer el que todavía se conserve, reparar quizá alguna pieza rota, comprar otra nueva de más calidad, aumentar el número de pastores y angelitos, etc. Algunos, que gozan de tradición familiar por varias generaciones, pueden llenar amplias habitaciones.