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ficción

La ficción en la novela de El Quijote

Mario Vargas Llosa dice que, antes que nada, Don Quijote de la Mancha es una imagen: la de un hidalgo cincuentón y tan esquelético como su caballo Rocinante, que, acompañado por un campesino basto y gordinflón montado en un asno, que hace las veces de escudero, recorre las llanuras de la mancha, heladas en invierno y candentes en verano, en busca de aventuras.