Educación para la concordia
Comprensión es una bonita palabra, de las más difíciles de aprender hoy día: podríamos definirla como meterse en la piel de los demás, y tiene como consecuencias lo que decía un alma santa: “Cuida de no hablar del mal. Hay siempre algo de bien en cada alma, aunque no sea más que en embrión”. Quizá en el ámbito social puede llamarse a esto concordia (opuesto a la “crispación”, término tan usado a nivel político y de toda la sociedad).