¿contrarreforma o reforma?
En muchos libros de historia e incluso entre católicos se suele hablar del Concilio de Trento como si hubiera sido la “contrarreforma” que la Iglesia preparó para frenar y contener la “reforma” protestante.
Existen, sin embargo, motivos importantes para no hablar de “contrarreforma” católica, sino de “reforma” católica, al referirnos al Concilio de Trento. Intentemos presentarlos ahora de un modo breve.