El viento en una tarde de verano
Un niño juega con el viento. Quiere atraparlo, pero se le escapa de las manos.
El aire ríe. Sabe que la niñez, como todas las edades, es algo fugitivo: huye para no volver más. La tormenta explota, en medio de los rayos y las sombras. Los pétalos de las flores caen veloces. El agua corre por las calles y las nubes se alejan después de haber bañado los montes y los valles.