Pasar al contenido principal

Juan Pablo II

El infierno como rechazo definitivo de Dios

1. Dios es Padre infinitamente bueno y misericordioso. Pero, por desgracia, el hombre, llamado a responderle en la libertad, puede elegir rechazar definitivamente su amor y su perdón, renunciando así para siempre a la comunión gozosa con él. Precisamente esta trágica situación es lo que señala la doctrina cristiana cuando habla de condenación o infierno. No se trata de un castigo de Dios infligido desde el exterior, sino del desarrollo de premisas ya puestas por el hombre en esta vida.

Evangelium Vitae

Evangelium Vitae, Sinopsis

INTRODUCCIÓN

Valor incomparable de la persona humana
  • Porque el hombre es un ser corporal y espiritual
  • Porque su "vida humana" conlleva al mismo tiempo a una dimensión material y otra espiritual; una temporal y otra eterna.

Nuevas amenazas a la vida humana