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Santa Aglae

Santa Aglae
Mayo 8

Etimológicamente significa “belleza, esplendorosa”. Viene de la lengua griega.

Por el sí de tu fe, de la confianza en Dios, el Resucitado hace de ti un ser vivo, te quiere en pie, no vacilando en un sentido o en otro. Tu fidelidad es un lenguaje absoluto, expresa a Dios tu amor.

A esta joven se le conoce, al leer su biografía, como la chica que supo llevar a feliz término el arte de hacer penitencia, palabra que suena a rara y a trasnochada en nuestros días.

Eran tiempos, siglo IV, en los que el imperio romano se desmoronaba a causa de sus vicios y degeneración.

Aglae, nombre raro para nuestra cultura, vivía en Roma en el siglo IV entregada a la vida religiosa con todas sus fuerzas.

Antes de su conversión, se dedicaba a guateques, fiestas mundanas hasta que la gracia de Dios le tocó el corazón.

Aunque estaba despistada acerca de su misión en la vida, sin embargo, una idea tenía clara: dedicarse a los pobres.

Reflexionó y se dio cuenta de que la vida de fiesta en fiesta no tiene sentido.

Y un buen día abandonó todo cuanto tenía. Mandó a su mayordomo que le trajera las reliquias de san Bonifacio y demás mártires a su casa,
Y durante el trayecto hacia otra parte, se convirtió al cristianismo.

Mientras tanto estalló una nueva persecución en la que moriría al día siguiente como mártir tal día como hoy del siglo IV.

Buscó la fidelidad a lo absoluto y, desde entonces, se sitió bien.