12 de abril
Abril 12
Etimológicamente significa “relativo a al dios Zeus”. Viene del griego y del latín.
Cuando se visita la preciosa ciudad de Verona, acude a la mente la imagen de este santo. Los ojos no sólo contemplan el anfiteatro – bien conservado – o la casa de Julieta, sino que también se da una vuelta para visitar la iglesia de san Zenón.
Es un gran relicario en el que se guardan valiosas reliquias de nuestra civilización.
El altar mayor se llama “La Pala de san Zenón”, pero lo que más conmueve al alma del creyente, son los relieves que hay en las puertas de este santo.
El murió hacia el año 380. Se le conocía solamente gracias a los cien sermones que se le atribuyen.
Se sabe que fue obispo de Verona, cerca de Venecia en el 362. Lo primero que aparece de su figura ,está en Juliano el Apóstata (361-363).
Es el caso de un clérigo pagano restablecido en su cargo durante el imperio, pero al que se le prohibió que hiciera proselitismo entre los cristianos.
Otro dato es el que proviene de Teodosia. Fue ella quien proclamó el cristianismo como religión del Estado.
El obispo Zenón vivía al modo, al estilo propio que llevaban los apóstoles.
Se le suele representar en el arte e iconografía como el santo que lleva un pez para recordarnos que, si no quieres estar a cargo de nadie, debes ir a pescar al río o al mar para comer lo necesario.
Buena idea y magnífica lección la que nos deja su simbología que, como siempre, trasciende la mirada hacia delante y nunca hacia atrás.
Si visitas Verona, además de lo típico en las guías turísticas, acércate un rato a contemplar el templo de san Zenón.
¡Felicidades a quien lleve este nombre!