Verano, Santo
Obispo, 11 de noviembre
Etimológicamente significa “estío”. Viene de la lengua latina.
El Señor dice: “Aunque vuestros pecados fueran como la grana, blanquearán como la nieve; aunque fuesen rojos como el carmesí, como la lana quedarán”.
Te parecerá raro este nombre entre los miles y miles de nombres de santos que hay en los calendarios.
Fue un obispo del siglo V.
Existe en Roma el Campo del Verano, esto es, el Campo de l Primavera.
Hoy está junto a la basílica de san Lorenzo, el cementerio más visitado por los romanos.
San Verano fue obispo de Francia, un siglo después de otro gran obispo, el más querido y famoso en Francia, san Martín de Tours.
Fue obispo de la Provenza, hoy y siempre tan predilecta para los pintores a causa de sus tonos y de su luminosidad.
El lugar en el que ejerció su apostolado episcopal se llama Vence.
Era hijo de Euquerio, obispo de Lyon, y tenía un hermano que se llamaba Solonio.
El padre ayudó incansablemente con su entrega y su buen ejemplo a que sus hijos fueran santos en el episcopado.
Para prepararlos bien, los envió al monasterio mejor de aquellos contornos, el de Lérins.
Con el tiempo, y dada su buena preparación intelectual y religiosa, fueron nombrados respectivamente obispo de Vence y de Ginebra.
Los Papas los aprecian mucho, sobre todo León I e Hilario.
Verano les escribía a menudo. En una de sus cartas, les decía:"Yo, Verano, le escribe al Papa, al que represento en el apostolado; le escribo a su beatitud y le ruego que rece por mí".