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San Filiberto

San Filiberto

20 de agosto

Etimológicamente significa “muy brillante”. Viene de la lengua alemana.

Si todo comenzara con la confianza en el corazón, quién se preguntaría:¿Qué hago yo en la tierra?

Lo que más importa en un principio no son los grandes conocimientos. Ellos tienen su valor, pero será tu corazón el primero en comprender el Misterio de la Fe.

Filiberto nació en la Gasconia, Francia, y murió en Noirmountier en el año 684.

Bajo la influencia de san Ouen, Filiberto decidió entrar en el monasterio de Rabais.

No sabía lo que le esperaba. Cuando llevaba ya algún tiempo en el lugar sagrado, desarrolló todas sus cualidades para el bien de la comunidad.

Por eso, no fue nada extraño que lo eligieran superior. Los monjes no sospechaban que iba a ser tan cumplidor y exigente en su mandato.

Desde luego, lo primero que hay que decir, es que los monjes eran poco observantes.

Tuvo que actuar con firmeza para que todos siguieran las reglas que libremente habían abrazado.

Viendo que sus esfuerzos eran inútiles por mejorar aquella difícil comunidad, dejó el monasterio para irse a otros.

En el año 654 se estableció en el de Rouen. Aquí mismo fundó el de Jumières.

También en éste le tocó sufrir lo suyo porque recibió una denuncia del mayordomo del palacio. Esto le costó la cárcel.

Pero su alma no se dejaba abatir por la contrariedad. Guiado por Dios, fundó otro monasterio, el de Normountier, en una islita cerca del Loira.

Y a éste le siguieron otros más, tanto para monjes como para monjas. Llevó la vida monástica a gran altura en todos los sentidos.