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San Avertano

San Avertano y San Romeo

Hermanos Carmelitas, 25 de febrero

 

Etimológicamente significan “que aparta” y “romero”. Vienen de la lengua latina.

Los amigos santos murieron con meses de diferencia. Avertano en 1380 en la Toscana, y Romeo en el mismo sitio, cuatro meses más tarde.

Habían llegado del convento de Limoges, estos dos buenos y santos hermanos carmelitas. Como la juventud ardía en sus venas, iban de camino a los Santos Lugares de Israel.

Pero se encontraban con enfermos a causa de la peste negra. Avertano era ya sacerdote y Romeo era un hermano converso.

Desgraciadamente, los dos murieron pronto de esa enfermedad. Se les  

Avertano y Romeo

hicieron las honras fúnebres con toda solemnidad y se veneraron sus reliquias. Se les colocó en dos altares. Y un autor piadoso escribió una biografía de estos dos aventureros de Dios.

Dice que a Avertano se le apareció un ángel para decirle que fuera carmelita. Los padres se oponían. Entonces él les dijo:"Es deber de los padres que dejen a sus hijos buscar su propia felicidad".

En el misal de los carmelitas se introdujo su fiesta en el año 1514.

Los rasgos de la espiritualidad de Avertano eran la contemplación en la acción y la acción en la contemplación.

Era también un santo que pedía mucha limosna, no para sí, sino para los demás. Le encantaban las peregrinaciones, la gran moda de aquellos años.

El nombre de Romeo es de sobra conocido, más que su compañero, debido, sin duda, a la obra de Shakespeare “Romeo y Julieta”.

Músicos y pintores se han inspirado en él para pintar o escribir música. Baste citar a Delacroix y Gounod.