Padre bueno y misericordioso
Padre bueno y misericordioso digno de alabanza y adoración; hoy te
doy gracias por tu amor tierno y compasivo porque perdonas faltas y
las apartas de tu vista sin que ellas disminuyan tu amor por mí.
Hoy quiero suplicarte una gracia especial, concédele a mi corazón el
poder comprender la debilidad de mis hermanos, el entender que
aquellos que me han herido tal vez también estaban heridos que no
podían dar lo que no tenían, por inmadurez o ignorancia. Dame, mi
Dios, un corazón tolerante, comprensivo y misericordioso como el tuyo.
Amen