El día de hoy
Mi trabajo es un trabajo como el de casi todos,
pero yo escojo qué clase de día quiero tener.
Hoy puedo amargarme porque tengo que trabajar
o puedo gritar de alegría porque tengo trabajo.
Hoy puedo llorar porque las rosas tienen espinas,
o puedo reír porque las espinas tienen rosas.
Hoy puedo quejarme porque tengo que hacer las labores del hogar
o puedo sentirme honrado porque tengo un techo en donde vivir.
Hoy puedo frustrarme porque no tengo dinero,
o puedo estar satisfecho de mi ingenio para ahorrar.