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Oraciones de adoración

Actos de confianza

Actos de confianza

Oh Dios mío, mi única esperanza, en ti he puesto toda mi confianza y sé que no me desilusionaré (317).

Conozco toda la omnipotencia de tu misericordia y confío en que me darás todo lo que necesita tu débil niña (898).

Oh Jesús, escondido en el Santísimo Sacramento, mi único Amor y Misericordia, te encomiendo todas las necesidades de mi alma y de mi cuerpo. Tú puedes ayudarme porque eres la misericordia misma; en ti toda mi esperanza (1751).

Oración del Buen Humor

Oración del Buen Humor.

 Concédeme, Señor, la gracia del buen humor
Los santos fueron santos, pero también fueron alegres.
Santa Teresa de Jesús decía: "Un santo triste es un triste santo".
No me imagino a Jesús serio, ni a María.
Hubo mucha seriedad en mi vida, demasiada formalidad.

Oracion para el angustiado

Oracion para el angustiado

Madre mía Celestial
qué me tienes reservado
no sé si es dolor o alegría,
pero sé que en este día
en que me siento agotada
sólo pienso en tu Hijo
que llevó su Cruz a cuestas,
que cargó todo el dolor
sin expresar una queja.
Cuánto sufrió Jesús
por el mundo y sus pecados,
y también pienso por Ti
tu dolor no se compara,
nada ni nadie en la tierra
sufrió lo que Tu sufriste.
Y siento que yo Virgen mía

Oración a la amabilidad

Oración a la amabilidad

Guárdame oh Señor, de la insignificancia,
que seamos amplios en el pensamiento,
la palabra y el acto.

Que eliminemos la crítica y nos apartemos
el egoísmo.
Permítenos alejar toda ostentación y encontrarnos
con el otro cara a cara sin lástima ni prejuicios.

que no juzguemos apresuradamente
y seamos siempre generosos.

Que nos tomemos tiempo para todos las cosas,
Permítenos crecer calmos, serenos, mansos.

Quiero admirarte Señor

Quiero admirarte Señor

Este día, ante Ti, quiero pedirte Señor:

La inocencia para que como un niño contemple
el amanecer, los pájaros y las mariposas.

La energía para combatir la pereza y levantarme feliz.

Las ganas de contemplarte a Ti y a San José en el trabajo,
compartiendo con mis compañeros tus enseñanzas
como así algún día lo hiciste y sigues haciéndolo
en quien deja guiarse por Ti.

El tiempo para agradecerte por los alimentos
que me das y pedirte que bendigas las
manos que los realizaron.

Plegaria desde mi barro

Plegaria desde mi barro

Tú hiciste al hombre, Señor, imagen de Tí mismo
moldeado en barro.
Por todo cuento tiene el hombre
mereces su alabanza.

Yo te alabo, Señor, por los sublimes,
los heroicos, los idealistas,
los que tienen voluntad de acero...
por el águila que vuela majestuosa.
También te alabo, Señor, por los pequeños,
los raquíticos, los encogidos.
Los estrechos, los que no pueden levantarse,
por el pato pesado y discordante.

Alabanza sin fin

Alabanza sin fin

Quiero ensalzarte,
Rey mío y Dios mío,
y bendecir tu nombre para siempre,
Deseo bendecirte cada día
y cantarle a tu nombre para siempre,
Pues grande es el Señor,
digno de recibir toda alabanza,
y no puede medirse su grandeza.