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Liturgia de las horas

Oración para todos los días 1

Oración para todos los días

Benignísima Madre de Misericordia Hija de Dios Padre,

Madre de Dios, Esposa del Espíritu Santo, Noble descanso de todos.

Vos sois en las cosas dudosas nuestra luz; en las tristes das consuelo;

en las angustias alivio; y en los peligros y tentaciones fiel socorro.

Sois paraíso de gracia y espirituales dones.

Bienaventurados los que de veras os aman y sirven,

y los que por santidad de vida se hacen siervos y devotos nuestros,

Oración para todos los días 2

Oración para todos los días

Oh Dios, Creador del universo y Creador mío, hoy te doy gracias por haber ordenado el mundo de manera tan admirable!

Gracias por haber hecho fértil la tierra, de tal suerte que nos provee con toda clase de frutos.
Gracias por los alimentos que preparamos con los frutos de la tierra.
Gracias por todas las criaturas y porque diariamente nos proporcionas alimento y bebida.

Padre, gracias por haber creado mi cuerpo de tal forma que puede
servirte.

Concédenos Señor...

Concédenos Señor...

 

Concédenos, Señor, ser perseverantes en el fiel cumplimiento de tu voluntad, para que en nuestros días crezca tu pueblo no solo en número, sino también en santidad. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, quién contigo vive y reina en unidad con el Espíritu Santo, por los siglos de los siglos.

 

Amén.

Señor nuestro Jesucristo...

Señor nuestro Jesucristo...

 

Señor nuestro Jesucristo, que en este sacramento admirable nos dejaste el memorial de tu pasión, concédenos venerar de tal modo los sagrados misterios de tu cuerpo y de tu sangre, que experimentemos constantemente en nosotros el fruto de tu redención. Tú que vives y reinas con el Padre, en unidad con el Espíritu Santo por los siglos de los siglos.

 

Amén.

Señor, que premias los méritos de los justos

Señor, que premias los méritos de los justos

 

Señor Dios, que premias los méritos de los justos y concedes el perdón a los pecadores que se arrepienten y hacen penitencia, escucha benignamente nuestras súplicas y, por la humilde confesión de nuestras culpas, otórganos tu perdón. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, quién contigo vive y reina en unidad con el Espíritu Santo, por los siglos de los siglos.

Amén.

Señor, Padre Santo 2

Señor, Padre santo...

Señor, Padre santo, que quisiste que tu Hijo fuese el precio de nuestro rescate, haz que vivamos de tal manera que, tomando parte en los padecimientos de Cristo, nos gocemos también en la revelación de su gloria. Por nuestro señor Jesucristo tu Hijo, quién contigo vive y reina en unidad con el Espíritu Santo, por los siglos de los siglos.

 

Amén.