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Liturgia de la Palabra

Oh Pecador

¡OH PECADOR! ¿DONDE VAS ERRANTE?
¡OH PECADOR! ¿DONDE VAS ERRANTE?
¡OH PECADOR! ¿DONDE VAS ERRANTE?
¿A DONDE IRAS?
 
De tu ambición el amor se esconde  (TRIS)
¿a dónde irás?
 
Busca la paz, el mal te está acechando  (TRIS)
¿a dónde irás?

Postrado ante la cruz

Postrado ante la cruz en la que has muerto
y a la que yo también te he condenado.
Sólo puedo decirte que hoy lo siento.
Sólo puedo decirte que hoy te amo.
Y te pido perdón por mis errores,
y te pido perdón por mis pecados,
Perdóname Señor, hoy me arrepiento,
perdóname mi Dios, crucificado.
 

Pescador

Cristo te hizo pescador 
Indícanos dónde encontrarlo para ser con Él felices como tú.
Voy navegando sin timón en mar abierto, 
me abandona la razón, 
apenas y sobrevivo como un niño perdido, 
busco Algo que no hay en mi interior.
Mas, de repente llegas tú, 
y en tu palabra el faro de la blanca luz. 
Llévame a puerto seguro, 
donde haya un futuro, 
donde exista un cielo más azul.

Que la lengua humana

1.- Que la lengua humana
cante este misterio:
la Preciosa Sangre
y el Preciosa Cuerpo.
Quien nació de Virgen,
Rey del Universo,
por salvar al mundo
dio su Sangre en precio.
 
Se entregó a nosotros,
se nos dio naciendo
de una casta Virgen;

Que sea mi vida la Sal

1.- El que me sigue en la vida,
sal de la tierra será;
mas si la sal se adultera,
los hombres la pisarán.
 
QUE SEA MI VIDA LA SAL,
QUE SEA MI VIDA LA LUZ.
SAL QUE SALA, LUZ QUE BRILLA
SAL Y FUEGO ES JESUS.
 
2.- Sois como la luz del mundo,
que a la ciudad alumbra;

Pon tu mano

Pon tu mano en la mano
de aquel que te da la mano.
Pon tu mano en la mano
de aquel que te dice: «Ven».
El será tu amigo
hasta la eternidad.
Pon tu mano en la mano
de aquel que te dice: «Ven».
 
Pon tus ojos en los ojos
de aquel que te está mirando,
pon tus ojos en los ojos

No adoreis a nedie

No adoréis a nadie, a nadie más que a El.
No adoréis a nadie, a nadie más que a El.
No adoréis a nadie, a nadie más,
no adoréis a nadie,  a nadie más,
no adoréis a nadie,  a nadie más que a El.
 
Porque sólo El nos puede sostener,
porque sólo El nos puede sostener.
No adoréis a nadie, a nadie más.