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El Sacramento de la Reconciliación

El sacramento de la reconciliación

Existen dos peligros en la vivencia del sacramento de la penitencia:

  • la rutina
  • el apartamiento

Rutina

 

  • Actos religiosos que no tocan la profundidad de la persona.
  • No provoca una crisis saludable de conversión interior.
  • Vida espiritual anquilosada

 

Abandono (desafección práctica)

 

  • Mas perniciosa que la rutina porque corta los canales de la vida sobrenatural.

 

Para que produzca saludables efectos el sacramento de la Reconciliación:

  • Actuación consciente de nuestra fe y de nuestro amor personal.
  • El sacramento de la penitencia es un verdadero encuentro personal y vital del hombre arrepentido y renovado interiormente con Cristo perdonador.
  • Confesión periódica, semanal si es posible.
  • Apreciar el sacramento
  • Práctica asidua, consciente y viva, llena de fe y sencillez
  • Fuente de renovación interior y de progresiva identificación con Cristo.

El cristiano acude al sacramento de la Reconciliación para:

  • El perdón de los pecados
  • Obtener la fuerza para luchar contra infidelidades, costumbres torcidas, hábitos de rutina y dispersión, y tendencias incontroladas de concupiscencia y amor propio.
  • Purificación interior
  • La firmeza de voluntad en su lucha por el Reino
  • Nuevas fuerzas para cumplir su misión.

Frutos del sacramento de la Reconciliación:

  • Una más íntima identificación con el espíritu y las actitudes de Cristo
  • Aumenta el conocimiento propio
  • Crece la humildad cristiana
  • Se desarraigan las malas costumbres
  • Se hace frente a la indolencia y pereza espiritual
  • Se purifica la conciencia
  • Se robustece la voluntad
  • Se lleva al cabo la saludable dirección de las conciencias
  • Aumenta la gracia en virtud del sacramento.

El que se confiesa:

  • Tiene un proyecto vital que le preocupa y anhela realizar
  • Quiere volver a ocupar su puesto en la inmensa marcha de la humanidad hacia el Reino
  • Es consciente de que al pecar se ha desligado de Dios y se ha separado de los hermanos
  • Sabe que en Cristo mediador vuelve a encontrar a Dios y vuelve a unirse con sus hermanos en el Cuerpo Místico de Cristo

Encuentra a Cristo en el sacerdote que administra los sacramentos in persona Christi